El ayuntamiento de Granada no descarta aplicar nuevas medidas de "contención del gasto"
Afirma que es posible aprobar un nuevo presupuesto en Junta de Gobierno Local tras un año de cuentas prorrogadas
El equipo de gobierno en el Ayuntamiento del Granada, del PP, no ha descartado este viernes la aplicación de nuevas medidas de "contención del gasto" si finalmente no se impulsan nuevas vías para incrementar los ingresos, por lo que ha reclamado "responsabilidad" a los grupos de la oposición y les ha llamado al diálogo para cerrar un presupuesto para el presente ejercicio.
El concejal de Economía y Hacienda, Francisco Lesdema (PP), ha hecho estas declaraciones en rueda de prensa después de que IU haya hecho público un informe del interventor municipal en el que se expone que el Ayuntamiento ha incumplido de forma reiterada el periodo medio de pago establecido en la Ley de Estabilidad Presupuestaria, lo que deja a las arcas municipales en "alerta de morosidad".
El edil de Economía ha matizado que en el mes de diciembre sólo se superó el plazo medio de pago en siete días --de 60 a 67-- y ha defendido la gestión económica que ha realizado desde su llegada al cargo, cuando se partía de más de 300 días de media.
Ha recordado que la ciudad cuenta con los mismos créditos iniciales de 2015, por lo que no puede hacer frente a las nuevas generaciones de gastos que se plantean debido a que el presupuesto está prorrogado.
Así, y tras acusar a la oposición de usar a los ciudadanos como "rehenes" para que el equipo de gobierno no ponga encima de la mesa un presupuesto, les ha pedido que abandonen "la confrontación" para aprobar las cuentas de 2016. Se ha fijado como "fecha tope" para hacerlo el primer trimestre del año puesto que "si en marzo no hemos conseguido ponernos de acuerdo, estoy seguro de que ya no lo haremos", ha augurado.
Preguntado por las medidas que podrían adoptarse para reducir el periodo medio de pago, el edil ha sostenido que, en todo caso, tienen que pasar por dos vías: "o más ingresos o menos gastos".
"Este equipo de gobierno ha planteado que sea por la vía de ingresos, ante la situación que hay para 2016; con el incremento salarial del 1 por ciento; el pago del 50 por ciento de la paga extraordinaria de 2012 o el abono del plan de pago a proveedores". Para ello, planteó el mantenimiento de la subida del 10 por ciento del IBI que se viene arrastrando desde 2012, aunque la medida fue rechazada por la oposición y retirada de la negociación de los presupuestos.
"Si no es por ahí, habrá que ajustar aún más los gastos (...) lo llevamos haciendo desde 2008 cuando el presupuesto era de 400 millones y ahora es de 260", ha relatado el edil, que en este contexto también ha urgido a la Junta a pagar "los doce millones de euros de deuda" que mantiene con el Ayuntamiento.
Por su parte, el portavoz del equipo de gobierno local, Juan García Montero, ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad a los ciudadanos, afirmando que el funcionamiento de la ciudad está "garantizado" y ha reprochado a la oposición que genere esta situación de alarma "por obtener rédito político".
De hecho, ha informado de que, en el caso de que un ayuntamiento permanezca un año con las cuentas prorrogadas, la ley da la posibilidad de aprobar un nuevo presupuesto por Junta de Gobierno Local.