El Ayuntamiento de Granada pone a disposición de familias desahuciadas un espacio para guardas sus enseres
La Oficina Social de la Vivienda pone en marcha un servicio de donaciones de muebles y electrodomésticos en buen estado para quien lo necesite
El Ayuntamiento de Granada ha puesto a disposición de las familias que hayan sido desahuciadas o estén en riesgo de exclusión residencial un espacio donde depositar sus enseres hasta que encuentren una nueva vivienda.
Se trata de un local de unos 600 metros cuadrados, que será gestionado por la Asociación de Adultos Cartuja, y que servirá para cobijar las pertenencias de las personas desahuciadas o sin vivienda que, “además de sufrir la pérdida de su casa, no saben dónde guardar sus muebles o enseres”.
La concejala de Derechos Sociales, Educación y Accesibilidad en el Ayuntamiento de Granada, Jemi Sánchez, destaca que Granada da un paso más para ayudar a los colectivos más vulnerables con un servicio que, “aunque pueda parecer simple, da respuesta a una necesidad diaria de muchas personas”, ha manifestado en relación al nuevo espacio de almacenaje, ubicado en el distrito Norte, “pero que dará cobertura a toda la ciudad”, ha especificado.
A su vez, el Ayuntamiento de Granada ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para que cualquier mueble, enseres o electrodomésticos que ya no se use pero que estén en buen estado sean donado a través de la Oficina Social de la Vivienda para estas familias. Estas donaciones también se depositarán en el nuevo contenedor de muebles y enseres.
Según ha explicado, durante la firma del convenio suscrito entre el Ayuntamiento de Granada y la Asociación Adultos Cartuja, la Oficina Social de la Vivienda canalizará las llamadas de los ciudadanos informando sobre las donaciones “y, a partir de ese momento, la asociación se trasladará en busca de los enseres en cuestión”, ha informado Sánchez Iborra.
Hasta el momento, el Ayuntamiento de Granada ha gestionado en el distrito Norte el acceso de 15 familias a una vivienda social en 2017 y está previsto que este año el número ascienda a 50, según datos aportados por la concejala de Derechos Sociales.