El Ayuntamiento de La Zubia también retira la bandera de la Unión Europea en señal de apoyo a los refugiados
Parte del equipo de gobierno acudirá esta tarde a la concentración ‘Stop al pacto de la vergüenza’ en Granada
El Ayuntamiento de La Zubia se suma a la protesta contra la Unión Europea por el trato a los refugiados, y esta mañana ha retirado la bandera de la UE de la fachada del Consistorio. El equipo de gobierno participará, además, en la concentración que hay convocada en Granada y en otras ciudades, para rechazar el acuerdo entre la Unión Europea y Turquía para expulsar a refugiados.
La Zubia pertenece a la Red Granadina de Ciudades Refugio, unión de municipios que en el mes de septiembre pasado se mostraron dispuestos a recibir a los refugiados, y se propusieron trabajar y preparar el terreno para su llegada.
En línea con ese apoyo a los refugiados y a los derechos que les reconoce la legislación internacional y la Carta de los Derechos Humanos, la concejala de Bienestar Social y Vivienda, Cristina Molina Martín (Ganemos La Zubia), en representación del resto del equipo de gobierno, ha subido esta mañana al balcón del Ayuntamiento para retirar del mástil la bandera de la Unión Europea.
Con esta señal de protesta, el de La Zubia se suma a una ya numerosa lista de municipios españoles que están arriando la bandera azul para mostrar su rechazo a las decisiones de la Unión Europea con respecto a los refugiados y solicitantes de asilo, “a los que no solo no se les están respetando los derechos que tienen reconocidos en tanto que refugiados, sino que se les está tratando de forma inhumana, permitiendo que permanezcan días y días durmiendo en el barro y bajo la lluvia”, en palabras de la concejala Cristina Molina.
A las siete y media de esta tarde hay una concentración convocada frente a la Subdelegación del Gobierno en Granada, ‘Stop al pacto de la vergüenza’, a la que acudirán concejales del equipo de gobierno de La Zubia.
Según la legislación internacional, los estados tienen la obligación de no expulsar ni devolver a los refugiados o solicitantes de asilo a cualquier país donde puedan correr peligro. Además del derecho de asilo en condiciones de seguridad, los refugiados deberían recibir al menos la ayuda básica y los mismos derechos que cualquier otro extranjero, derechos civiles básicos, incluyendo la libertad de pensamiento, de movimiento, y el derecho al respeto como persona.