El Cascamorras más internacional conquista Fitur
El Cascamorras ha hecho hoy su puesta de largo en Madrid como Fiesta de Interés Turístico Internacional. Dentro de los actos del Día de la Provincia de Granada en Fitur 2014, los alcaldes de Baza y Guadix se han felicitado por el reconocimiento obtenido el año pasado por una tradición de cinco siglos de antigüedad y se han mostrado convencidos de que dicha calificación supondrá un espaldarazo para que la fiesta sea más conocida en España y el extranjero y se convierta en un referente turístico para la zona norte de la provincia.
El accitano que encarnó al Cascamorras en 2013, Alejandro Baena, ha ondeado su bandera en el stand de Granada en Fitur y ha animado a todos los presentes a participar el próximo septiembre en la siguiente edición de la fiesta. El Cascamorras fue declarada el año pasado Fiesta de Interés Turístico Internacional por el Ministerio de Industria, Energía y Turismo, una distinción de carácter honorífico que se concede a los acontecimientos que supongan manifestaciones de valores culturales y de tradición popular, con especial consideración a sus características etnológicas y que tengan una especial importancia como atractivo turístico. Para ello se tienen en cuenta variables como la antigüedad de la celebración, su continuidad en el tiempo, el arraigo popular y la participación ciudadana, su originalidad y la repercusión en medios de comunicación internacionales.
La Diputación de Granada, a través de su Patronato Provincial de Turismo, ha adquirido el compromiso con los municipios de Baza y Guadix de promocionar el Cascamorras en todas las actuaciones nacionales e internacionales previstas en su plan de acción. La primera de ellas ha sido Fitur, para la que ha editado especialmente 3.000 ejemplares de un ‘flyer’ con fotografías e información de la fiesta, que están siendo distribuidos durante los cinco días que dura la feria de Madrid.
El Cascamorras es una fiesta originaria de la Edad Media y que se ha ido transmitiendo oralmente de generación en generación a través de los siglos. Según la tradición, fue un obrero morisco, Juan Pedernal, vecino de Guadix, quien trabajaba en Baza cuando se encontró una escultura de la Virgen de la Piedad. Juan Pedernal intentó llevarse la imagen, pero no pudo y tras varios litigios se resolvió que la talla podría salir de Baza si conseguía llegar hasta ella inmaculado, sin una sola mancha. De esta manera cada vez que una delegación de accitanos, encabezados por el sucesor de Juan Pedernal, ha intentado acceder hasta la Iglesia de la Merced con la intención de llevarse la Virgen son recibidos con pinturas que lo manchan para evitar que pueda cumplir su cometido.
El Cascamorras es el personaje enviado por los accitanos para intentar cada 6 de septiembre hacerse con la imagen, intención que impedirán con todas sus fuerzas los vecinos de Baza. El fracaso en la empresa hará que el 9 de septiembre de cada año el Cascamorras vuelva a Guadix con las manos vacías y que los accitanos, en reprimenda por no haber logrado su objetivo, lo vuelvan manchar.
En la fiesta todos los participantes intentan manchar al Cascamorras con aceite y barro, y siempre acaba totalmente embadurnado. El accitano que encarna al Cascamorras es el responsable, con sus idas y venidas, de marcar el ritmo de la carrera, haciéndola más rápida o más lenta, y en su mano está el ganarse el respeto y el cariño de todos los participantes.