El centro de interpretación de la Casa de Zafra abre sus puertas para mostrar la historia del Albaicín
La previsión es que este nuevo recurso turístico, que será la "puerta natural de entrada al conocimiento del Albaicín", declarado por la Unesco Patrimonio de la Humanidad, sea inaugurado este próximo miércoles
El proyecto para dotar de contenido a la Casa de Zafra, que constituye uno de los mejores ejemplos de la arquitectura palaciega nazarí (siglos XIV y XV), ya ha finalizado; de modo que este espacio funcionará, previsiblemente a partir de esta semana, como un centro de interpretación donde se mostrará cómo eran las casas moriscas y el modo de vida de sus habitantes.
La previsión es que este nuevo recurso turístico, que será la "puerta natural de entrada al conocimiento del Albaicín", declarado por la Unesco Patrimonio de la Humanidad, sea inaugurado este próximo miércoles, según ha informado a Europa Press la concejal de Turismo en el Ayuntamiento de Granada, Rocío Díaz.
La iniciativa surge tras la rehabilitación a la que ha sido sometida la Casa de Zafra, una vivienda palaciega catalogada como Bien de Interés Cultural (BIC) y enclavada a los pies de la Alhambra.
Este centro de interpretación prevé centralizar además todas las rutas turísticas que se realicen desde el Albaicín y profundizar en la historia de este barrio morisco, según ha detallado Díaz, quien ha aludido a la posibilidad de que también sea usado como un espacio de conferencias y charlas que, a su vez, también quede en parte al servicio de los vecinos.
La Casa de Zafra se convertirá en un nuevo recurso turístico de la ciudad que profundizará en cómo eran las casas moriscas y la forma de vida en ellas, a través de diversa documentación histórica que ha sido adaptada al lenguaje turístico y recopilada por expertos de la Agencia Albaicín.
La iniciativa se desarrolla en virtud del Plan de Excelencia Turística que sufragan Junta y Ayuntamiento de Granada, en cuyo marco también se incorporará este año a la oferta de Granada el Cuarto Real de Santo Domingo, que es considerado el edificio residencial nazarí más antiguo que se conserva en España.
Todo ello para favorecer que los turistas encuentren nuevos atractivos que les animen a visitar la ciudad y a aumentar el periodo de pernoctación en la capital.