El Covirán Granada se estrena con una sufrida victoria
Los de Pablo Pin se han impuesto al Río Ourense Termal por un ajustado 68-64 en la primera jornada de la LEB Oro
No ha tardado el Covirán Granada en conocer cuál es la dureza de la LEB Oro. La ilusión y la alegría del estreno de categoría se esfumaron cuando el balón se fue al aire, cuando comenzó una batalla sin tregua de la que salió victorioso el conjunto granadino. Los de Pablo Pin se han impuesto al Río Ourense Termal por un ajustado 68-64 en su primer encuentro de la temporada, en el que, pese a cuajar un buen primer cuarto, terminaron sufriendo.
No era un partido más el que hoy reunía a 3.743 espectadores en el Palacio de los Deportes. El recinto del Zaidín acogía una cita especial, la más importante en la historia de la Fundación CB Granada. Su primer equipo, el Covirán, debutaba en LEB Oro, y lo hacía ante su afición, esa que nunca le ha abandonado y que le llevó en volandas al ascenso durante la pasada temporada.
Tampoco lo hizo en el estreno del nuevo curso, en el que el Covirán Granada no se enfrentaba, precisamente, a una ‘cenicienta’. El conjunto rojinegro recibía al Río Ourense Termal, uno de los aspirantes al playoff de ascenso que, sin duda, mediría el nivel de la ilusionante plantilla que dirige Pablo Pin, que, a priori, afronta esta campaña, la de la ‘Fiebre del Oro’, con el objetivo de lograr cuanto antes la permanencia.
Comenzó el choque con solo una de las caras nuevas del Covirán Granada en el quinteto titular y un Río Ourense que salió dispuesto a cumplir su con su rol de aspirante al playoff. Anotó en su primera posesión por medio de Rozitis y, pese a que respondieron los granadinos con un triple de Alo Marín y un mate de Sergio Olmos, Sergio Rodríguez y Vidal mantuvieron a su equipo por delante (5-8).
Pero el ritmo del partido fue incrementándose conforme se acercaba el ecuador del primer cuarto, lo que benefició al conjunto granadino, que se puso por delante gracias a las canastas de Carlos de Cobos en dos ocasiones, Sergio Olmos y Alejandro Bortolussi (11-8). La respuesta visitante llegó ya en los últimos compases del primer acto, por medio de Jhornan Zamora y Van Wijk, aunque esta no era suficiente para frenar a los de Pablo Pin, que supieron contener los ataques del cuadro gallego y aprovechar sus ataques para cerrar el parcial con un 22-17 a su favor.
En el segundo cuarto, los de Pablo Pin trataron de mantener la inercia adquirida en los primeros diez minutos de partido, y no tomaron mal camino para lograrlo, pues Guille Rubio amplió a siete puntos la ventaja nazarí desde la línea de tiro libre. Sin embargo, un triple de Ott la recortó a cuatro casi de inmediato y dio comienzo a un periodo de igualdad que mantuvo el marcador invariable hasta los últimos cinco minutos del cuarto.
Durante estos, aunque Carlos de Cobos y Sergio Olmos pusieron el marcador del Covirán en los 28 puntos, el cuadro nazarí tuvo que sufrir. Los de García de Vitoria comenzaron a recortar puntos en el electrónico con un triple de Muratovic y Masters cuando aún restaban cuatro minutos para el descanso. Pablo Pin pedía calma a sus jugadores, que debían aguantar el vendaval ofensivo de los gallegos, y la tuvieron. Pese a que Ott, Zamora y Sergio Rodríguez se empeñaron en llevar a su equipo a la remontada, los rojinegros, gracias a su acierto desde la línea de 4’60 metros -anotaron 10 de los 12 tiros libres de los que dispusieron en el segundo cuarto- lograron mantener tres puntos de ventaja al descanso (34-31).
A la vuelta de los vestuarios, el cuadro nazarí tiró de la experiencia de Guille Rubio, que salió de inicio en el tercer cuarto, para poder encauzar definitivamente el choque. El ‘15’ del Covirán rompió el hielo en el tercer parcial, pero la respuesta de los visitantes no se hizo esperar. Watson recortó dos puntos al cuadro nazarí, mientras que un triple de Santiago Vidal les uso a un solo punto de los de Pablo Pin.
Este mínimo colchón se vio neutralizado con una canasta de Watson, aunque, Carlos de Cobos, Sergio Olmos y Joan Pardina aparecieron para apagar fuegos y devolver una ventaja de siete puntos a los rojinegros (44-37). Terminó resultando esencial, pues, a pesar de los numerosos errores en ataque de los de García de Vitoria, Ott, Van Wijk y Muratovic pusieron el empate a falta de un minuto para el final del cuarto. Almazán y Sergio Olmos anotaron para poner al Covirán tres arriba en el marcador y pensar ya en el último cuarto, pero Sergio Rodríguez, con un triple sobre la bocina, empató el choque (47-47).
Comenzaba el último acto como si de otro partido se tratase, con dos equipos igualados que no dejarían de golpearse hasta que alguno quedase noqueado. Almazán atacó primero. Después lo hizo Masters. Cada posesión era determinante y cada fallo podía ser decisivo. Así es la LEB Oro y así se la presentaron al Covirán, que volvió a ser empatado por medio de Ott cuando aún restaban seis minutos y medio de batalla.
Fue entonces cuando reaccionaron los granadinos. Guiados por Guille Rubio, que sumó cinco puntos en dos minutos, y Carlos de Cobos, que volvió a encestar de tres, llevaron a García de Vitoria a pedir tiempo muerto con un 61-53 en el marcador. El Palacio jugó su papel para prolongar el buen momento de los suyos en la reanudación, aunque lo que obtuvo la afición fue una nueva reducción de la diferencia, por medio de Jhornan Zamora y un gran Watson (61-58).
El choque llegó a sus últimos 35 segundos con un ajustado 64-61 después de que Guille Rubio y Sergio Olmos lograsen mantener la ventaja pese a una canasta de Watson. Entonces, Carlos Corts puso en pie al Palacio de los Deportes con un triple que puso el 67-61 en el marcador a falta de 30 segundos para el final del partido.
Este no fue el final del sufrimiento nazarí. Ott respondió a un tiro libre anotado por Joan Pardina con un triple que puso el 68-64 en el marcador a falta de seis segundos para el final del partido. No hubo tiempo para más, por suerte para los intereses del Covirán Granada, que pudo endulzar su estreno pese a las dificultades que presentó el choque. Ahora, el cuadro rojinegro piensa ya en la próxima jornada, en la que los de Pablo Pin ya conocen lo que les espera.
Ficha técnica:
Covirán Granada: Eloy Almazán, Alejandro Bortolussi, Alo Marín, Carlos de Cobos y Sergio Olmos.
También jugaron: Carlos Corts, Devin Wright, Guille Rubio, Joan Pardina y David Iriarte.
Río Ourense Termal: Santiago Vidal, Sergio Rodríguez, Davis Rozitis, Ott y Van Wijk.
También jugaron: Jhornan Zamora, Pol Molins, Masters, Muratovic y Earl Watson.
Árbitros: Moralez García-Alcaide, Langa de Martín y Gallego Rodríguez.
Parciales: 22-17; 12-14; 13-16; 21-17.
Resultado Final: 68-64.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la primera jornada de LEB Oro disputado en el Palacio de los Deportes de Granada, ante 3.743 espectadores.