El Ejército español ha entrenado en dos años a 22.800 militares iraquíes contra el Estado Islámico
Los efectivos se han centrado en el adiestramiento para el combate, pero también han impartido formación más específica en operaciones especiales y desactivación de explosivos
Los militares españoles han entrenado a unos 22.800 soldados iraquíes en los dos años que llevan desplegados en el país árabe para formar a su Ejército y que pueda hacer frente y derrotar a los terroristas del Estado Islámico, en el marco de la coalición internacional que lidera Estados Unidos y de la que forman parte casi 70 naciones.
Desde el principio, los efectivos españoles se han centrado en el adiestramiento para el combate, para lo cual han entrenado seis brigadas, pero también han impartido formación más específica en operaciones especiales y desactivación de explosivos. Y desde hace unos meses, el entrenamiento se ha ampliado al futuro escenario post-Estado Islámico en el que las fuerzas de seguridad iraquíes puedan asegurar el orden en las zonas reconquistadas, según los últimos datos facilitados por el Ministerio de Defensa.
De los algo más de 300 militares españoles desplegados en Irak, casi 230 se encuentran alojados en la base 'Gran Capitán' de Besmayah, a unos 60 kilómetros de Bagdad, formando las brigadas, mientras que cerca de 70 instruyen en la capital y Tají a los grupos de operaciones especiales. Además, 14 oficiales se integran en los distintos cuarteles generales de la coalición en tareas de planeamiento y conducción de las operaciones.
Y fuera del ámbito de la coalición internacional, pero dentro de la iniciativa de la OTAN sobre el desarrollo de capacidades para Irak, España contribuye a la formación en Jordania de soldados iraquíes en la lucha contra artefactos explosivos improvisados (IED, por sus siglas en inglés), con participación de personal del Centro de Excelencia ubicado en la localidad madrileña de Hoyo de Manzanares.
ESTÁN LLEGANDO 150 MÁS
A los algo más de 300 efectivos que en estos dos años han conformado el contingente español en Irak se están uniendo en estos días 125 militares y 25 guardias civiles que se encargarán de reforzar la formación tanto del Ejército como de las fuerzas iraquíes que deben encargarse de la seguridad de los territorios de los que se va expulsando al Estado Islámico.
Los avances en estos casi dos años de entrenamiento han sido evidentes, según el jefe de los instructores españoles en Irak, el general de brigada Ángel Castilla, que lo resume así: "Un Ejército antes ineficaz está acorralando a los terroristas y está cerca de derrotarlos totalmente".
"Un número considerable de militares y policías iraquíes han mejorado notablemente sus capacidades individuales y, por tanto, las de las unidades en las que están encuadrados. Muchos de los soldados se han batido duramente en los combates que han llevado al Ejército iraquí hasta las calles de Mosul y aún lo siguen haciendo", explicó el general en una reciente entrevista con Europa Press.
RECONQUISTA DE LA CAPITAL DEL 'CALIFATO'
Desde el pasado mes de octubre, el Ejército iraquí se encuentra inmerso en la decisiva batalla de Mosul, la que ha sido la capital del 'califato' del Estado Islámico en Irak, una ofensiva que ha sido calificada por el general Castilla como "extraordinariamente compleja".
"Se han realizado avances rápidos en las poblaciones que rodean el núcleo de la ciudad y en algunos barrios periféricos, pero conforme se va arrinconando a los fanáticos, los combates se hacen más duros. Allí se lucha calle por calle y casa por casa", ha explicado.
Por eso, el jefe del contingente español no se atreve a hacer una predicción sobre cuánto tiempo podría durar esta ofensiva para reconquistar Mosul. "Por el bien de todos, ojalá que sea lo más breve posible", ha afirmado.