El emotivo vídeo tributo de un hombre a su perro
La historia del aventurero y fotógrafo, Ben Moon, es una de estas historias de despedidas dolorosas con estos seres tan especiales que comparten tantos años en nuestras vidas
Manrique Pascual
No existe duda alguna de que la relación entre los seres humanos con su perro puede llegar a crear un vínculo de amor y amistad tan fuerte que la inevitable marcha del fiel amigo se convierte en un trago amargo por el que pasar.
La historia del aventurero y fotógrafo, Ben Moon, es una de estas historias de despedidas dolorosas con estos seres tan especiales que comparten tantos años en nuestras vidas. Nada más y nada menos que 14 años es lo que Denali, el perro de Moon, vivió y compartió con el fotógrafo.
'Denali' es también el nombre del cortometraje con el que Moon ha ganado varios premios y que cuenta, en forma de tributo y desde la perspectiva del animal, su particular historia en la que el cáncer estuvo muy presente en sus vidas, hasta que la enfermedad ganó la batalla.
La pareja se conoció en 1999 cuando Moon rescató a Denali de un refugio de animales. Desde el primer momento el perro se adaptó a la vida nómada y aventurera de su dueño y juntos compartieron grandes momentos viajando por las costas del Pacífico.
Cuatro años después de haberse conocido, Moon tuvo que enfrentarse a un diagnóstico poco alentador sobre un cáncer colorrectal en estadio 3. Mientras duró el tratamiento y las intervenciones quirúrgicas, a Denali se le permitió acompañar a su dueño en sus momentos más duros hasta que Moon logró recuperarse y superar aquello.
La vida continuaba para esta entrañable pareja y nuevos parajes y nuevas aventuras se les abrieron paso hasta que en 2014 el cáncer volvió a hacer acto de presencia. Denali tuvo que enfrentarse a la enfermedad pero, debido a su edad avanzada, no tuvo fuerzas para luchar contra ella y un mes después murió en los brazos de Moon.
El fotógrafo y artista quiso rendir un tributo especial a su perro con un conmovedor vídeo cargado de emociones capaces de saltar alguna que otra lágrima pero con un mensaje inspirador y también alegre y divertido.
