El escuadrón de voluntarios que vela por los profesionales de Granada
Distintos movimientos altruistas como Granadamaker, Granadecor o personas de manera individual fabrican y entregan pantallas protectoras a varios colectivos de la provincia
En tiempos de necesidad crece la solidaridad. La estamos viendo en cada esquina de cada barrio. Entre trabajadores y ciudadanos. De forma individual y colectiva.
En Granada hay un grupo de personas que se dedica a repartir solidaridad en forma de protección. Distribuyen pantallas protectoras entre distintos colectivos de la provincia para brindarles el mejor regalo en tiempos de pandemia: su salud.
Se trata de Granadamaker y Granadecor, dos grupos organizados que disponen de impresoras 3D y pasan la cuarentena fabricando pantallas protectoras. “El que no tiene impresora recoge material o lo compra. Hacen falta acetatos o planchas de poliestireno obstruido. Yo, entre unas cosas y otras, llevo 500 euros gastados”, comenta Federico Garrido, un vigilante de seguridad que ha decido colaborar con esta causa de manera activa, a pesar de no contar con la infraestructura necesaria.
Federico ayuda en todo lo que puede debido a su conciencia con el coronavirus. El miedo del Covid-19 le pasó muy cerca. EL que me dio motivación fue Cecilio Rodríguez, el novio de mi abuela, que ha estado 20 días ingresado en el hospital”.
Cecilio, al igual que Federico y otras muchas personas han contribuido a la causa con obra de mano, dinero y voluntad. Porque es cierto que las donaciones de empresas han bajado el volumen desde que se iniciara el estado de alarma.
Con toda la solidaridad recogida, el grupo de Granada Maker lleva construidas más de 20.000 pantallas protectoras entregadas a distintos colectivos, Granadecor 4.000 y Federico Garrido ha repartido y gestionado más de 2.000.
En total, son unas 270 personas que diariamente regalan uno de los bienes más apreciados que tiene el ser humano: el dinero. “Como he estado en contacto con el novio de mi abuela, he tenido que estar de baja. Por eso quería ayudar en todo lo que se pudiera”, comenta Federico Garrido.
Policía Nacional, Local, Guardia Civil, personal del SAS, empresas de seguridad privada, servicios sociales, distintas asociaciones e, incluso, supermercados han recibido las donaciones de las pantallas protectoras que no tienen otro objetivo que el de evitar el contagio del coronavirus y así salvar vidas.
“Detrás de una pantalla hay una historia”, comenta Garrido. Por ello, este vigilante de seguridad se pasa los días, junto a su abuela y el novio de ésta, montando pantallas, mientras un escuadrón de voluntarios las fabrica para que velar por los profesionales de Granada. Un ejemplo de tantos.