‘El esquí, mi pasión’, un libro que relata la historia reciente de Sierra Nevada

Los últimos 60 años de Sierra Nevada, su historia más reciente a través de la memoria de uno de sus grandes protagonistas, es el tema del libro ‘El esquí, mi pasión’. Luis Santisteban, su autor, lo ha sido todo en la estación de esquí granadina. Por supuesto, esquiador. Pero también, entre otras muchas cosas, profesor de esquí, empresario o miembro del Comité Organizador de los Mundiales de Esquí, el mayor evento deportivo celebrado en la historia de Granada.

Precisamente la presentación del libro, celebrada en la sala Manuel de Falla del Palacio de Congresos, congregó a gran parte de los organizadores de ese evento, empezando por su máximo responsable, Jerónimo Páez, autor del prólogo. En cierto modo, también fue un homenaje a todo el equipo organizativo que en la década de los noventa colocó a Sierra Nevada en la cúspide mundial.

Junto a decenas de personas relacionadas con el mundo de la nieve en todos sus ámbitos, también hubo personajes de relevancia arropando a Luis Santisteban en la presentación del libro, caso del cantante Miguel Ríos -al que el autor enseñó a esquiar- o a la presidenta del Consejo Superior de Deportes, la granadina María José Rienda.

En el acto, presentado por el periodista Luis Vaquero, intervinieron en un coloquio sobre el escenario los mencionados Páez, Ríos y Rienda junto al director de la estación, Eduardo Valenzuela, y el actual consejero delegado de Cetursa, Jesús Ibáñez. Todos ellos glosaron la figura de Luis Santisteban y contaron anécdotas sobre Sierra Nevada.

El protagonista de la noche explicó que “al escribir este libro, lo que he pretendido es hacer un recorrido por mi vida, por la vida de mis amigos, por las competiciones, por la escuela de esquí y por los Campeonatos del Mundo y las Copas del Mundo que hemos tenido en Sierra Nevada. También un recorrido por todos los que han estado esas etapas y ya no están aquí, como reconocimiento y homenaje a todos ellos”.

Al echar la vista atrás de esos 60 años de pasión por el esquí, Luis Santisteban recuerda que “se queda con todos los recuerdos, porque no tengo malos recuerdos de mi vida. Desde que mi padre me metió en vena el tema de la montaña y de la nieve hasta que pasé por la escuela, cuando conocí a todos los amigos que he tenido a lo largo de estos años -que aún me emociono al decirlo- y, sinceramente, no tengo ni un mal recuerdo".

Santisteban, que agradeció a las decenas de amigos su presencia en el acto, incidió en que “para mí es un lujo. Jamás me imaginé algo así. Estoy orgulloso de los amigos que tengo. Son mi patrimonio”.