El Gobierno central inicia las expropiaciones para construir la línea 400kV Baza-Caparacena
Asegura que es una infraestructura vital para mantener la vertebración territorial y social de Andalucía Oriental y para el futuro económico de casi 100 municipios
La Dependencia de Industria y Energía de la Subdelegación del Gobierno en Granada inicia a partir de este lunes 23 de septiembre el proceso de levantamiento de actas previas a la ocupación de determinadas fincas afectadas por la construcción de la línea eléctrica aérea a 400 kV, doble circuito, Baza-Caparacena.
El pasado 22 de agosto, el BOE publicaba el anuncio de la resolución de la Delegación del Gobierno de Andalucía que establecía los plazos para la ejecución del proceso de expropiaciones que se iniciará mañana, 23 de septiembre, en la localidad de Cortes de Baza y continuará en días sucesivos en los distintos municipios afectados hasta el próximo 12 de noviembre, que culminará el proceso.
Según ha explicado la subdelegada del Gobierno en Granada, Inmaculada López Calahorro, Red Eléctrica de España (REE) ya ha tramitado los permisos constructivos con los diferentes organismos competentes y así, se estima que las obras puedan iniciarse en breve.
Una vez puesta en marcha esta infraestructura, se espera que se convierta en uno de los mayores polos de energías renovables de España, capaz de generar electricidad para una población de 660.000 habitantes y crear 15.000 empleos directos e indirectos.
Según ha expuesto Inmaculada López Calahorro, el nuevo eje permitiría el aprovechamiento del elevado recurso renovable existente en esta zona de la provincia, principalmente en el norte de Granada y Almería, que actualmente cuenta con multitud de proyectos con un alto grado de madurez técnica y avance administrativo, y cuya ejecución depende de esta infraestructura.
Además de estos importantes proyectos económicos, el nuevo eje va a contribuir, según la subdelegada del Gobierno, a mejorar la oferta de otros servicios públicos como colegios, agua, servicios de sanidad o instalaciones deportivas, que mejorarán al contar con una infraestructura que minimicen los cortes de suministro.
Se trata, en definitiva, de una infraestructura vital para mantener la vertebración territorial y social de Andalucía Oriental y para el futuro económico y el bienestar y progreso de casi 100 municipios y de los ciudadanos que en ellos viven.