El Granada CF cumple y alimenta el sueño del ascenso directo (2-0)
El conjunto rojiblanco se ha impuesto al Nástic de Tarragona en un plácido duelo que le permite consolidarse en la segunda plaza
No escucharán a nadie en el club hablar de ello, pero ya está permitido soñar en Los Cármenes. En una jornada propicia para realzar los valores democráticos, el Granada CF ha aplicado su ley de forma dictatorial, sin urnas ni comicios, para derrotar a un inofensivo Nástic de Tarragona que queda al borde de la Segunda B. El conjunto rojiblanco ha necesitado solo un par de zarpazos, ambos a balón parado y durante el primer acto, para imponerse al cuadro grana, que pudo irse goleado y que no ha sido capaz de incomodar a los nazaríes en todo el choque. Este se ha resuelto finalmente con un plácido 2-0 que permite a la plantilla granadina asentarse en la segunda plaza y que alimenta la ilusión de su hinchada, que ya mira hacia Primera División.
Diego Martínez salió con todo, o, al menos, con todo de lo que disponía. Fede Vico recuperó su plaza en la media punta, con un revitalizado Vadillo en el flanco derecho y Puertas, pese a sus molestias, en la banda contraria. Ojeda se quedó en el banco después de varias actuaciones discretas, acompañado de Adrián Ramos, cuyo gol en Soria no fue argumento suficiente para tomar el relevo a Rodri, que volvió a actuar en punta. Enrique Martín, por su parte, introdujo a Salva y Josema para paliar las ausencias de Fali y Ramiro Guerra, así como a Kanté, que sentó al exrojiblanco Uche.
Pero el factor que hacía tambalear cualquier planteamiento del técnico nazarí era realmente la ausencia de Montoro. Ramón Azeez ocupó su puesto junto a Fede San Emeterio, al igual que ocurriera en Soria, pero el centrocampista nigeriano adolece de la clarividencia del valenciano y el juego rojiblanco lo notó. No obstante, el equipo no le echó demasiado en falta, gracias en gran medida a la inoperancia tarraconense desde los primeros compases del duelo.
El conjunto local, aunque algo atropellado en la construcción del juego, se hizo pronto con el control del choque y no necesitó más de siete minutos para adelantarse en el electrónico. Fede Vico, omnipresente en la mitad del campo rival, forzó un córner que se encargó de poner en juego Vadillo. El gaditano la tocó en corto hacia el cordobés, que la devolvió al ‘siete’ para que se entretuviera con la cándida zaga visitante. Vadillo gambeteó sobre la línea de fondo hasta casi plantarse en el área pequeña y la puso atrás, donde Víctor Díaz anduvo espabilado para mandarla al fondo de la red.
No hubo ni siquiera atisbo de reacción en el conjunto grana, cuya inventiva apenas superaba la línea divisoria y, cuando lo hacía, no tardaba en diluirse. Así, el compromiso se convirtió en un soliloquio de los de Diego Martínez, que asediaron la meta defendida por Becerra y pudieron ampliar su renta en varias ocasiones antes de la media hora de juego.
Rodri fue el primero en errar. El testarazo del delantero soriano no fue tan certero como el balón colgado por Vadillo, que culminó así una magnífica triangulación con Fede San Emeterio y Fede Vico. Su insistencia sería premiada poco después. Antes, el propio mediapunta cordobés hizo levantarse de sus asientos a los hinchas nazaríes con un potente disparo con su diestra que se fue rozando el poste izquierdo de la meta visitante. El Granada bailaba con un cadáver.
Vadillo se gustaba y Mikel Villanueva personificaba la fragilidad del cuadro tarraconense, pero todo hacía indicar que el encuentro se iría al descanso con el 1-0 en el marcador. Entonces, a Rodri le llegó al fin su momento. En el descuento del primer acto, una falta lejana puesta en juego por Vadillo fue cabeceada dentro del área por Fede San Emeterio. El centrocampista cántabro puso el balón en el poste contrario, donde el delantero soriano, completamente libre de marca, anotó el 2-0 con el que ponía fin a una sequía iniciada en el mes de noviembre.
Entre poco y nada cambió el partido tras el intermedio. Los de Enrique Martín saltaron al terreno de juego algo mejor que en el primer acto, lo que les permitió incluso comprobar de qué color vestía Rui Silva, pero la mirilla de Pipa, Kanté y el exrojiblanco Luis Suárez parecía desviada. Los rojiblancos, con una marchita menos tras el paso por los vestuarios, no solo no sudaron para contener la ofensiva visitante, sino que, además, necesitaban realmente poco para poner en apuros a Becerra.
Los cambios ralentizaron un partido sentenciado casi desde su comienzo. Diego Martínez dio descanso a Puertas y a Rodri para introducir a Alberto Martín y Adrián Ramos, mientras que Enrique Martín buscó sin éxito añadir inquina a su equipo con la entrada de Uche y Sadik. Ojeda se sumó a la fiesta mientras en la grada ya estaban de celebración, y pudo redondear el encuentro. Su testarazo en el minuto 89, a centro nuevamente de Fede Vico, se topó con el travesaño, aunque ya poco importaba.
El Granada CF hizo sus deberes y culminó el sorpaso en la clasificación, lo que le permite acariciar el ascenso directo. "Y pobre del que quiera robarnos la ilusión", acabaron cantando los hinchas, que también sienten cerca el retorno. A los de Diego Martínez aún les queda por recorrer un camino tan largo como arduo, y para muestra está la próxima salida al Carlos Tartiere, único pensamiento del técnico vigués. Pero, al menos durante el trayecto, los rojiblancos pueden seguir soñando.
Ficha técnica:
Granada CF: Rui Silva; Víctor Díaz, Germán, José Antonio Martínez, Quini; Fede San Emeterio, Ramón Azeez; Antonio Puertas (Alberto Martín 72’), Fede Vico, Vadillo (Dani Ojeda 86’); y Rodri (Adrián Ramos 76’).
Nástic de Tarragona: Becerra; Salva, Noguera, Mikel Villanueva (Ikechukwu Uche 52’), Josema; Pipa, Imanol García, Thioune, Abraham; Kanté y Luis Suárez (Sadik 75’).
Goles: 1-0: Víctor Díaz, min. 7; 2-0: Rodri, min. 45.
Árbitro: Soto Grado. Amonestó al local Germán, así como a los visitantes Josema, Kanté y Luis Suárez.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la 36ª jornada de la Liga 1|2|3 disputado en el estadio Nuevo Los Cármenes, ante 12.489 espectadores. Antes del partido, el Juvenil División de Honor del Granada CF recibió un homenaje por su reciente clasificación para la Copa del Rey.