El Granada CF encalla ante el Deportivo (0-1)
Los rojiblancos caen derrotados por la mínima ante el Deportivo en un encuentro en el que se anuló un gol con la mano de Puertas
Regresaba el Granada CF a Los Cármenes y lo hacía con la mejor de las novedades. Ángel Montoro, la brújula de los rojiblancos, regresaba al once tras superar unos problemas físicos que le impidieron ejercitarse con normalidad durante la semana. Volvía, además, para recibir a un duro rival, el Deportivo, que opta a todo esta temporada y que quería ser las rocas en las que encallase el barco de un Granada que solo sumaba una victoria en las últimas seis jornadas.
La carta de navegación, esa que no se enseña de puertas para afuera, marca como destino el ascenso. Para ello, hay dos factores que son imprescindibles: permitir que la brújula guíe el navío y esquivar los escollos del mar alborotado por la tormenta que supone siempre la Segunda división española. Hasta ahora se ha conseguido con éxito, pero la travesía es casi tan larga como suculento es el tesoro que espera en el destino.
Con este objetivo, bastante más modesto de puertas para afuera, el Granada salió a competir con todo contra el Deportivo. Los locales quisieron el balón desde el principio, obligando a los visitantes a buscar un fútbol más directo en los primeros minutos, lo que permitió a los de Diego Martínez llegar con más asiduidad al área rival, aunque sin terminar de incomodar a Giménez.
Un disparo de Fede Cartabia a los doce minutos de juego advirtió al Granada de que los gallegos no estaban de visita al marcharse lamiendo el poste de la meta defendida por Rui Silva. Sin embargo, la réplica del Granada fue contundente. El marcador indicaba 25 minutos de la primera parte transcurridos cuando Ramos alcanzó a rematar de cabeza un centro servido desde la banda derecha para provocar un saque de esquina en el que llegaría la ocasión más clara de la primera parte. Una dejada encontró dentro del área a Martínez, que remató de volea desde el aire para estrellar el esférico contra el larguero.
Menos de diez minutos después, volvería a tenerla el Granada, esta vez en los pies de Vadillo. El extremo recibió un envío en largo de Montoro para cruzarla al primer toque con la puntera del pie derecho, pero el disparo se marchó a saque de puerta. Tres minutos después, Adrián Ramos recuperaba dentro del área rival un balón, pero el golpeo se fue muy lejos de la meta de Giménez, provocando el reproche de Vadillo a su compañero. El colombiano volvería a tenerla en el minuto 39, pero no alcanzó a rematar el balón que habría supuesto el 1-0 por escasos centímetros.
Ante el acierto de un Granada que lo hacía todo bien, exceptuando la finalización, el Deportivo optó por agazaparse y aguardar su momento. No como un gato doméstico, sino como un tigre que sabía que era cuestión de tiempo que llegase esa acción que les permitiese anotar. Sin embargo, ese momento no llegaría, al menos en los primeros 45 minutos, que terminaron con un empate a cero.
Tras la reanudación, las cosas se torcieron para el Granada. Martínez no acertó a despejar en condiciones en una zona peligrosa y se topó con Quique. El propio '7' deportivista fue el encargado de recoger el rechace y batir a placer a un Rui Silva que no pudo hacer nada por impedir el tanto visitante, poniendo el 0-1 en el marcador a los 48 minutos de partido.
Desde entonces, todo fue navegar en un velero con el viento en contra. El equipo no está acostumbrado a verse por detrás en el marcador y se notó, aumentando el juego directo y con excesos de precipitación en algunos casos que acabaron por derivar en más pérdidas por errores no forzados. Los Cármenes, con mejor entrada que otros días, amagó con pitar, aunque terminó decantándose por animar al equipo para intentar ser ese jugador número doce que los rojiblancos echaban en falta.
Pasó la hora de juego casi sin ocasiones, ni para los locales ni para unos visitantes que se conformaban con el gol. Tampoco hubo rastro de Pozo, que tocó poco balón y mostró aún menos acierto cuando lo hizo. Tuvieron que dejar su sitio Vadillo y Ramos para buscar una reacción, pero tampoco surtieron efecto las entradas de Rodri y Puertas.
El juego en ataque se volvió estático, las ideas se acabaron conforme el navío, incapaz de virar, se aproximaba hacia las afiladas rocas. Ni siquiera la vuelta de Montoro pudo terminar de llevar a buen puerto el partido para el Granada, que vuelve a acercarse a su juego, pero sigue sin pólvora en los cañones que deben ayudarle a superar la travesía.
Ejemplificó la desesperación local Puertas, rematando un centro con la mano que terminó en gol bien anulado por el colegiado, hecho que sacó de quicio a los jugadores del Granada y añadió tensión al partido durante la fase final. Entre la vorágine de protestas la volvió a tener el conjunto rojiblanco gracias a un remate a la media vuelta que detuvo a bocajarro Dani Giménez.
Con esta intervención se confirmó el peor de los pronósticos. El Granada caía derrotado por segunda vez consecutiva y se alejaba de los primeros puestos de la clasificación. El barco finalmente terminaba por encallar en las rocas gallegas, quedando con una sola victoria en los últimos siete partidos, pero con opciones aún de que el viento vuelva a soplar por sus velas y ayude de nuevo en su travesía.
Ficha técnica
Granada: Rui Silva; Víctor Díaz, Germán, Martínez, Quini; San Emeterio, Montoro; Vadillo (Puertas 63'), Fede Vico (Dani Ojeda 77'), Pozo y Adrián Ramos (Rodri 54').
Deportivo: Dani Giménez; David Simón, Domingos Duarte, Pablo Marí, Diego Caballo; Álex Bergantiños, Pedro Mosquera (Didier Moreno 78'), Edu Expósito; Fede Cartabia (Nahuel 65'), Quique González y Borja Valle (Somma 86').
Goles: 0-1, Quique (48')
Árbitro: Valentín Pizarro Gómez. Amonestó a Montoro (66'), Puertas (80') y Rodri (80') en el conjunto local y David Simón (17'), Caballo (90') y Duarte (90') en los visitantes. También expulsó a Nahuel (90') por agredir a un rival.
Incidencias: Partido correspondiente a la 25ª jornada de la Liga 1|2|3 disputado entre Granada y Deportivo de La Coruña en el Estadio Nuevo Los Cármenes ante 13.128 espectadores. Antes del comienzo se guardó un minuto de silencio por el fallecimiento del exjugador del Granada Gilberto Navarro.