El hombre que extorsionó a la familia de Yeremi: "Fue una broma de mal gusto"
Un hombre identificado como J.M.P.F., acusado de presuntamente extorsionar a la familia de Yeremi Vargas, el niño de siete años de edad que desapareció el 10 de marzo de 2007 mientras jugaba con sus primos en un terreno cerca de su casa en Vecindario, en Gran Canaria, alega que "fue una broma de mal gusto".
Durante el juicio celebrado en el Juzgado de lo Penal número 6 de Las Palmas de Gran Canaria y que quedó visto para sentencia, el acusado confesó estar "arrepentido" de haber llamado al Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad 112 a los pocos días de desaparecer el menor para reclamar un rescate de 6.000 euros, aunque se comprobó que no está vinculado en absoluto con la desaparición del pequeño, según una información publicada hoy por el periódico La Provincia recogida por Europa Press.
Tras pedir "perdón" por su actuación, J.M.P.F. negó que tuviera la intención de obtener dinero a cambio de la falsa liberación del niño.
Sin embargo, la ex suegra del acusado explicó que éste incluso se propuso "disfrazar" a la hija de su pareja, que, además estudiaba en el mismo colegio que el niño, para "hacerla pasar por Yeremi", manifestación que el imputado rechazó.
El abogado de la acusación particular ha solicitado imponer una pena de ocho meses de cárcel para el acusado por un presunto delito de extorsión. Sin embargo, la Fiscalía no formuló acusación y pidió la libre absolución para J.M.P.F., al entender que no existe tal delito porque no hubo violencia o intimidación, aunque denunció su actitud "deleznable, vil y amoral", según precisa el citado diario.