El juicio del 'caso Alhambra' continúa con la declaración de los primeros acusados
El proceso sienta en el banquillo de los acusados a 49 personas por un supuesto fraude
El juicio del llamado 'caso Alhambra', que sienta en el banquillo de los acusados a 49 personas por un supuesto fraude en la venta de entradas y el control de accesos al monumento, afronta este lunes su segunda sesión, en la que está previsto que arranque la ronda de declaraciones de los investigados.
El tribunal de la Sección Segunda de la Audiencia comunicará además su decisión sobre la personación como acusación particular de la Junta en este proceso, después de que una de las defensas planteara en las cuestiones previas que la Administración no puede estar en el proceso sin autorización previa del Consejo de Gobierno o, en su defecto, el encargo del consejero del ramo.
En caso de estimarse esta cuestión, un total de cinco personas a las que solo acusa la Junta quedarían libres del procedimiento. El resto, seguirían estando acusados por el Ministerio Fiscal.
Durante la primera sesión del juicio, tres acusados ratificaron ante el tribunal el acuerdo de conformidad que habían pactado con la Fiscalía y por el cual aceptaban una condena de nueve meses de cárcel por los delitos de apropiación indebida y falsedad documental.
Se trata de dos trabajadores del monumento --un oficial de primera y una controladora-- y una persona vinculada a la agencia de viajes Washingtong Irving Travel, María Pilar A.B.. El acuerdo de esta última conllevó la retirada de la acusación de la Fiscalía y la Junta de Andalucía para Juan C.J., vinculado también a Washingtong Irving Travel.
La Fiscalía y la Junta de Andalucía interesaron que el procesado comparezca como testigo a lo largo del proceso, de modo que pudo abandonar la sala y, según avanzó el presidente del tribunal, el magistrado José Requena Paredes, quedará absuelto cuando se dicte sentencia. De este modo, el proceso continuará a partir de ahora con 49 acusados en vez de los 50 iniciales.
Un trabajador del BBVA al que únicamente acusa la Junta de Andalucía y que también había alcanzado un preacuerdo de conformidad, está pendiente de que el tribunal decida si acepta o no la personación de esta administración en el caso.
Los delitos que se juzgan en esta causa son los de apropiación indebida, estafa, falsedad en documento mercantil, daños al patrimonio histórico-artístico y cohecho.
Según consta en el escrito de acusación del Ministerio Público, la presunta trama delictiva estaba encabezada por cinco miembros de una misa familia, dos de ellos guías turísticos, otro director comercial del Hotel Carmen y el resto de las agencias de viajes Washingtong Irving Travel S.L. y Daraxatour S.L., quienes "con la finalidad de conseguir un provecho patrimonial ilícito idearon y ejecutaron durante los años 2002 a 2005 un plan" para ingresar lo que sus clientes pagaban para obtener una entrada a la Alhambra, monumento al que accedían pese a este sistema ilícito.
Estos acusados aprovecharon también las relaciones de amistad y profesionales que les unían con otro de los procesados, un guía turístico que durante 40 años prácticamente monopolizó la visita del turismo japonés a Granada gracias a su conocimiento del idioma y contactos con agencias que gestionaban grupos de esta nacionalidad.