El PP lamenta el apoyo de los grupos municipales a las ordenanzas "insolidarias y perjudiciales" del PSOE
El grupo municipal señala que las medidas propuestas "suponen un aumento de la presión fiscal para los granadinos, especialmente para las clases medias"
El grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Granada ha argumentado su voto en contra de la aprobación inicial de las ordenanzas fiscales propuestas por el PSOE "porque suponen un aumento de la presión fiscal para los granadinos, especialmente para las clases medias, y porque se traducirán en un incremento de impuestos como el IBI de al menos un nueve por ciento" por lo que las ha considerado "insolidarias y perjudiciales" para la ciudad.
"Son unas líneas rojas que no estamos dispuestos a traspasar", ha explicado el concejal del PP Francisco Ledesma quien ha afirmado que el voto a favor de los grupos de Izquierda Unida y Podemos y la abstención de Ciudadanos ponen de manifiesto que en Granada no hubo "un pacto de investidura sino un pacto de gobierno".
Ledesma ha puesto el acento en que el grupo 'popular' habría podido cambiar el sentido de su voto en la comisión y apoyar las ordenanzas si el concejal de Economía, Baldomero Oliver, hubiera aceptado la propuesta de rebajar el IBI, "que por otra parte es algo que nos exigieron a nosotros", pero se ha encontrado con la excusa de que la situación económica del Ayuntamiento es delicada "cuando ya hemos demostrado que es exactamente la misma que hace un año".
Las ordenanzas, según ha continuado Ledesma, son las propias de un gobierno "acorralado, escondido y que no escucha a los granadinos" habiendo "tenido la oportunidad de hacer rebajas que exigió el año pasado como la de ocupación de la vía pública por terrazas".
El edil del PP también ha lamentado que el PSOE sigue hablando de la "herencia recibida" y que se pone "medallas que no podemos aceptar", como que criticaran el plan de inspección puesto en marcha por los ediles 'populares' en el gobierno municipal para investigar el fraude fiscal y que puso de manifiesto una deuda de un millón contraída por la Junta por el Parque Tecnológico de la Salud y otra, de idéntica cantidad, por el edificio de su sede en Almanjáyar.
"Ahora se abre el periodo de alegaciones y por supuesto que las haremos, pero siempre sin aceptar que el recibo del IBI sea un céntimo más caro que el del año 2012, puesto que desde ese año lo tenemos congelado", ha indicado Francisco Ledesma que ha adelantado que "esa condición difícilmente se va a cumplir puesto que las ordenanzas incluyen una revisión catastral que en el mejor de los casos va a ser del 4 por ciento", lo que, unido a la "eliminación" de las bonificaciones del 5 por ciento, se traducirá en una subida del 9 por ciento.
En resumen, según los cálculos del PP, "esto supondrá un incremento medio de entre 30 y 35 euros anuales en el recibo del IBI de una familia media granadina" lo que es "una subida muy brusca, sobre todo teniendo en cuenta que el impuesto llevaba cinco años congelado".
Así, el portavoz adjunto del grupo 'popular', Antonio Granados, ha criticado que estas ordenanzas suponen un "grave perjuicio" para los granadinos, pero especialmente para las clases medias, las más afectadas "por la reducción devastadora de las bonificaciones".
Para Granados, el alcalde, Francisco Cuenca, está "más acorralado" cada vez y, en vez de dar las respuestas que necesitan los granadinos, se limita a "montar teatrillos".