El proyecto de renovación de alumbrado del Albaicín recibe el premio de la FEMP a `buenas prácticas locales a favor del clima´
Con este proyecto, que ha supuesto la sustitución de 2.000 puntos de luz del Albaicín por energía limpia y barata, se ha reducido en más de 21 toneladas las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera
El proyecto municipal de renovación del alumbrado del Albaicín con bombillas LED denominado 'LED para iluminar el mejor atardecer del mundo' ha recibido el premio de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) a las buenas prácticas locales a favor del clima en la categoría de `Energía´. El galardón fue entregado en Madrid, el pasado día 28 de noviembre, en el marco del congreso nacional de Medio Ambiente.
El galardón es consecuencia de la sustitución en el emblemático barrio de 2.000 puntos de luz por energía limpia y barata, “una apuesta decidida por una energía que reducirá en más de 21 toneladas al año las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera de la ciudad de Granada” en palabras del edil de Medio Ambiente, Miguel Ángel Fernández Madrid.
La instalación de tecnología LED en estas luminarias imprime al histórico barrio un ambiente agradable al conseguir una mayor uniformidad lumínica, que ha pasado del 40 al 60%. Además, la reproducción cromática mejora la identificación de los viandantes y vehículos, con lo que abunda en la seguridad vial.
El tiempo transcurrido desde la instalación de las nuevas luminarias confirma que el LED es una tecnología eficiente y económica. El servicio municipal de Mantenimiento del área de Urbanismo, Medio Ambiente, Salud y Consumo ha constatado un ahorro real de energía eléctrica del 69%. Este sistema permite graduar los niveles de iluminación, adaptándolos a distintas franjas horarias según épocas del año. Por ejemplo, las bombillas lucen al 100% desde su encendido hasta las 23 horas (las 0 horas en verano), siguiendo una intensidad descendente que llega a reducirse al 50% desde la 1 hasta las 6 de la madrugada.
El ajuste de los consumos no incide negativamente en el nivel lumínico. Al contrario: en calzadas ha subido del 20 al 65% y en aceras, del 6 al 15%. Simultáneamente, se ha reducido la contaminación lumínica del 41 al 1% hacia el espacio superior y del 32 al 19% en fachadas.
El cambio ha añadido un ahorro en costes de mantenimiento y reposición a las arcas del Ayuntamiento. Las lámparas convencionales tienen una vida útil de 13.000 horas (3 años) frente a las 70.000 (16 años) de las de LED.
El Ayuntamiento de Granada, a tenor de los satisfactorios resultados cosechados en el Albaicín, se propone extender el LED a la mayor parte de la capital. De las 30.075 luminarias existentes en Granada, 5.165 son ya farolas dotadas de la nueva tecnología.