El PSOE pide catalogar y retirar los vestigios franquistas que quedan en pantanos y presas
Los socialistas argumentan que la presencia de simbología franquista en este tipo de obras públicas choca no sólo con la Ley de Memoria sino, en el caso de los escudos preconstitucionales también con el Real Decreto por el que en 1981 se estableció un plazo máximo de tres años para que el escudo franquista fuese sustituido por el constitucional.
El PSOE quiere que el Gobierno haga un catálogo de los vestigios franquistas que quedan en pantanos, presas y obras públicas similares y que, después, en aplicación de la conocida como Ley de Memoria Histórica, inste su retirada a las entidades que las gestionan.
Con este objetivo, los socialistas han registrado una proposición no de ley para su debate en la Comisión Constitucional del Congreso que lleva la firma del diputado valenciano José Luis Ábacos, y a la que ha tenido acceso Europa Press.
Y es que, en su proposición no de ley, además de reclamar que se haga inventario de todos los vestigios y que se retiren, el PSOE exige en concreto que se elimine el escudo preconstitucional que hay en la presa del pantano de Benagéber (Valencia).
SE CONSTRUYERON CON TRABAJADORES FORZADOS
Ábalos Meco remarca que la permanencia de dicho escudo en un complejo de esas características es "innecesaria e impropia" y, por eso, solicitan que, en aplicación de la Ley de Memoria el Gobierno inste a la Confederación Hidrográfica del Júcar, de la que depende la presa, a proceder a su retirada y a la de las placas conmemorativas con alusiones a Franco que quedan en ese recinto.
"Respetar las leyes que se promulgan es obligación del Gobierno, pero también resaltamos que este caso constituye, además, una ofensa para todos aquellos españoles forzados a construir un pantano que además se dedicó al dictador (se bautizó como Embalse del Generalísimo) que creó la situación por la que fueron obligados a ello", reseña el diputado socialista.
Ábalos Meco incide, asimismo, en que la permanencia de esa simbología franquista "aún hoy ofende a los familiares" de quienes construyeron el pantano y "a todo demócrata que contemple una presa en la que las casamatas de vigilancia que aún existen están orientadas para apuntar a los trabajadores forzados" que la pusieron en pie.