El PSOE ve "irregular" que Lanjarón ponga a la venta entradas de una fiesta pública como la Carrera del Agua
El grupo municipal ha anunciado "que solicitará un informe jurídico al Secretario-Interventor, puesto que se ha anunciado un ingreso en las arcas municipales "sin debate ni consenso,
El PSOE de Lanjarón (Granada) ha opinado este martes que es "totalmente irregular" poner a la venta entradas de una fiesta pública como la Carrera del Agua, que se celebra cada noche de San Juan en esta localidad, y ha acusado al alcalde, Eric Escobedo (PP), de romper el "espíritu" de esta tradición con una medida a su juicio "incontrolable, irrealizable y de dudosa legalidad".
El PSOE de Lanjarón ha manifestado en una nota que "está totalmente de acuerdo en limitar el aforo para garantizar la seguridad y recuperar el valor tradicional de esta fiesta".
El problema a su entender es que al alcalde "se le han ido las fiestas de las manos, haciendo llamadas masivas a la participación y siendo el impulsor de los famosos autobuses del botellón".
El asunto, según advierten los socialistas, "no se soluciona lucrándose indiscriminadamente de los visitantes y vecinos no empadronados", pues con esta medida se podrían tener "10.000 personas de botellón a 5 euros".
Sostienen desde el grupo municipal socialista que "la medida no ha sido consensuada con los vecinos" y "puede incurrir en inconstitucionalidad, al establecer un gravamen por lugar de empadronamiento, discriminando a muchos cañoneros que han tenido que emigrar", puesto que la previsión es cobrar a quienes no residan en el municipio.
En este sentido, el PSOE ha anunciado "que solicitará un informe jurídico al Secretario-Interventor, puesto que se ha anunciado un ingreso en las arcas municipales "sin debate ni consenso, sin pasar por pleno y sin que haya un expediente sobre la legalidad y viabilidad económica".
Frente a esta medida, el PSOE propone prohibir los autobuses de botellón; aprobar una tasa legal para que los asistentes a la Carrera del Agua paguen el parking provisional que ofrece un buen número de plazas en el paraje de la Fuente-Aporta y coordinarse con los cuerpos de seguridad para que una vez lleno no puedan seguir llegando vehículos, lo que controlaría el aforo de la carrera.