El Realejo y Granada se vuelcan con la Soledad y los Favores en la hora nona
Varios centenares de personas coparon el Campo del Príncipe para presenciar la visita de la Virgen al Cristo de Piedra a las 15.00 horas
Jero Camero
La multitudinaria concentración de personas que se produjo el pasado Viernes de Dolores en el Campo del Príncipe para el besapié al Cristo de los Favores tan solo era un adelanto de lo que se iba a vivir una semana más tarde en el mismo punto.
Este Viernes Santo, día de la vigilia por la muerte de Cristo, los Favores no iba a estar solo en la plaza del Realejo. Tras dos años de ausencia, la Virgen de la Soledad salió de su templo para prestar su visita a los pies del crucificado, una cita que congregó alrededor de un millar de personas.
Antes de eso, a partir del mediodía, ya eran muchos los granadinos y greñúos que pasaban por la emblemática talla para pedir al Cristo su deseo para los próximos meses. Los actos y los diferentes rezos se fueron sucediendo a los largo de la mañana hasta que la Soledad llegó a la plaza.
El esperado baile de la Virgen ante la talla en piedra se vivió dejando salir la emoción que se había contenido durante los dos últimos años. El rezo de la hora nona reunió a los feligreses en un profundo silencio, solo roto por los murmullos de aquellos recitaban.
