El Supremo confirma la sentencia que anuló el aforo de mil personas de la Sala Prince
El TSJA estimó en su día el recurso que interpuso la Asociación Plataforma Vecinos del Realejo alegando que este incremento de aforo en casi 800 personas iba en contra del Plan General de Ordenación Urbanística
El Tribunal Supremo ha inadmitido el recurso que presentó la empresa de la Sala Prince contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) que dio la razón a los vecinos del Realejo y anuló el aumento de aforo del local a 1.006 personas, frente a las 251 que tenía inicialmente.
Concretamente, el TSJA estimó en su día el recurso que interpuso la Asociación Plataforma Vecinos del Realejo alegando que este incremento de aforo en casi 800 personas iba en contra del Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) y del Pepri Centro, "que establece como usos prohibidos en su ámbito las discotecas y salas de fiesta".
El alto tribunal andaluz se mostró de acuerdo con este planteamiento y resolvió que con este aforo de más de mil personas las dimensiones de la actividad de esta discoteca situada en la plaza del Campo del Príncipe quedaba fuera de la ordenación urbanística, especialmente de la que afecta a este casco histórico. Junto a ello abogó por dar "preferencia al interés público" frente al interés particular de la sala de fiestas.
Los responsables de la Sala Prince recurrieron esta resolución ante el Tribunal Supremo, que el pasado 28 de noviembre acordó su inadmisión a trámite por carecer de interés casacional, según ha avanzado el diario Granada Hoy. En una diligencia de ordenación posterior, fechada el 10 de enero de 2020, el TSJA da por recibida la resolución del Supremo y da traslado de la misma para su cumplimiento.
Desde la plataforma de vecinos han aplaudido esta resolución, que se enmarca en los distintos procedimientos judiciales que han emprendido en los últimos años contra esta discoteca.
El colectivo lleva "luchando" desde que en 2015, cuando la sala tenía un aforo de 161 personas, cambió de dueños y se acometió una gran remodelación que a su entender está fuera de ordenación.
Hace ahora un año el Juzgado de lo Contencioso Administrativo 2 de Granada anuló además la licencia urbanística que el Ayuntamiento de Granada concedió en julio de 2017 a esta discoteca, antiguamente llamada sala Príncipe, para ejecutar una nueva planta de más de cien metros cuadrados.