El tiempo y la duración, importantes para el almuerzo escolar y el recreo
Para el estudio, los investigadores evaluaron la ingesta del almuerzo y la actividad física de 151 estudiantes de 4º y 5º de dos escuelas de bajos ingresos de EEUU
Un nuevo estudio encuentra que la duración y el momento del almuerzo y el recreo están relacionados con las opciones alimenticias y la actividad física de los niños en edad escolar. Estos hallazgos podrían ayudar a las escuelas a establecer políticas que promuevan comidas escolares más saludables y aumenten la actividad física durante el recreo.
La estudiante de doctorado en la Universidad de Illinois, Urbana-Champaign, Estados Unidos, Gabriella McLoughlin, presenta esta nueva investigación en la Sesión Científica y Reunión Anual de la Sociedad Americana de Nutrición durante la reunión de Biología Experimental 2017, que se celebra desde el sábado hasta el miércoles en Chicago, Estados Unidos.
"La mayoría de la investigación se ha centrado únicamente en la ingesta nutricional o la actividad física durante el recreo --señala Naiman Khan, profesor asistente y líder del equipo de investigación--. Éste es el primer estudio que mide objetivamente la ingesta de alimentos en el almuerzo junto con la actividad física y considera la influencia de la duración y el tiempo".
Para el estudio, los investigadores evaluaron la ingesta del almuerzo y la actividad física de 151 estudiantes de cuarto y quinto grado de dos escuelas de bajos ingresos de Estados Unidos. Cada escuela programó el almuerzo justo antes o inmediatamente después del recreo.
LOS NIÑOS TOMAN MÁS VERDURAS SI EL ALMUERZO ES ANTES DEL RECREO
Los investigadores encontraron que, aunque se desperdició menos comida cuando se celebró el recreo antes del almuerzo, los niños consumieron una mayor proporción de verduras cuando se les ofreció el almuerzo antes del recreo. Cuando los niños tenían un tiempo más largo para el almuerzo y el periodo de recreo combinados, los niños eran proporcionalmente más activos físicamente cuando se les ofreció la comida antes del recreo.
Cuando el periodo del recreo de almuerzo era más corto, los niños eran más activos cuando fueron al recreo antes del almuerzo. "En general, nuestros hallazgos sugieren que los comportamientos en el recreo y el almuerzo están interrelacionados", afirma McLoughlin.
"Sin embargo, las opciones de alimentos específicos y los niveles de actividad en los que participan los niños pueden estar sujetos al tiempo y la duración del almuerzo y el recreo". Las relaciones entre la ingesta de alimentos en el almuerzo y la actividad física fueron independientes de los factores previamente demostrados que contribuyen a la actividad de receso, como el peso de un niño y el sexo.
Las directrices actuales de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades estadounidenses recomiendan planificar el receso antes del almuerzo para reducir el desperdicio general de alimentos. Aunque el nuevo estudio mostró un menor desperdicio de alimentos cuando el recreo es antes del almuerzo, los hallazgos sugieren que las recomendaciones actuales pueden tener consecuencias no deseadas para los tipos de alimentos consumidos y podrían afectar a la actividad física durante el recreo, dependiendo de la duración del receso.
"Planeamos comunicar nuestros hallazgos a los maestros, administradores y formuladores de políticas escolares para facilitar la implementación de políticas basadas en la evidencia que apoyen la capacidad de los niños de cumplir con las recomendaciones de actividad física diaria y nutricionales", señala Khan.