Empate que no deja satisfecho a ninguno (2-2)
El Granada se adelantó dos veces en el marcador mediante un gran El-Arabi | La expulsión de Success encerró a los rojiblancos que encajaron el 2-2 en el minuto 86
La victoria del Sporting de Gijón ante el Atlético de Madrid por 2 a 1 justo antes del comienzo del encuentro entre Granada y Rayo convertía el duelo directo de la previa en finalísima, y Los Cármenes ya se preparaba para una tragicomedia. El resultado dejó un empate loco que no deja satisfecho a ninguno de los dos equipos.
Antes de conocer ese resultado, las gradas del estadio ya lucían preparadas para la batalla. Entre lluvia, sol y un arcoiris, Los Cármenes advertían e intimidaban al rival, y daban apoyo a los suyos. El primer gol ya tenía autor y era la afición rojiblanca, que lucía en uno de los fondos de portería un mensaje de colores rojiblancos: “Que se enteren en primera que el Granada no se va”.
José González sorprendió a todos con la inclusión de Success en la punta y Cuenca en la banda, dejando en el banquillo a Peñaranda. Foulquier fue la otra novedad en lugar de Miguel Lopes, que se caía de la convocatoria por molestias musculares.
El partido comenzó con intenciones distintas por parte de ambos equipos. La presión alta del Rayo en los primeros minutos frente a un Granada que no tenía problema en quitarse la pelota de encima, buscando arriba a El-Arabi o a Success. Cero complicaciones en la zona de abajo.
El primero en avisar sería el Rayo. Piti lo intentaba a media distancia. Los madrileños buscaban la espalda de la defensa rojiblanca con un inquieto Miku. El debutante Jesús Fernández se mostró seguro y decidido en un par de salidas de su portería.
Con un ‘pelotazo’ llegaría el gol del Granada. Biraghi se la quitó de encima y le salió un pase perfecto para la carrera de Isaac Cuenca, que realizó un perfecto control orientado y puso un balón perfecto en el área para El-Arabi, que sin oposición y de primeras no falló ante Juan Carlos. Mucho premio para el Granada, que no había creado peligro (11’, 1-0).
Tras el tanto inicial, el partido perdió algo de ritmo. Piti lo volvió a intentar desde lejos y esta vez obligó a emplearse a Jesús Fernández, que hizo un paradón a un disparo muy potente del ex granadinista. El Granada esperaba atrás y el Rayo tenía la posesión.
El Granada creaba peligro en los pocos acercamientos que tenía sobre la meta de Juan Carlos. Rochina estuvo a punto de meter el segundo a balón parado. Su lanzamiento de falta desde el franco izquierdo se marchó por muy poco por la derecha del guardameta rayista.
Una buena jugada entre El-Arabi y Rochina provocó que el valenciano sacara toda su calidad. Tras un buen pase al hueco del marroquí, Rochina tuvo poca confianza con su pierna derecha para definir y decidió intentar el pase, que fue rebotado. Entre rabonas, ’pisadas’ y regates inverosímiles salió a flote de la acción para euforia del público.
Con los mismos protagonistas, Rochina ponía un balón perfecto al área a balón parado y El-Arabi remataba con la testa al palo izquierdo de la meta de Juan Carlos. El rebote lo intentaba recoger con la espuela, terminando la acción en saque de puerta.
Success comenzó apático y algo apagado el partido. Volvía a la delantera, tras jugar toda la temporada pegado a la banda. A medida que avanzó el partido mejoró su rendimiento. Las peleó todas, incluso tuvo una buena ocasión para marcar tras pase de Cuenca, pero su remate se estrelló en la defensa rayista. El propio Cuenca también dio muchos detalles de calidad en lo que fue su debut como titular con la elástica rojiblanca.
Cuando más duele y los primeros cuarenta y cinco minutos llegaban a su final, el Rayo conseguía el empate a través de Pablo Hernández, que tras un rebote procedente de un centro de Quini desde la derecha, se encontraba el balón manso para introducirlo en la portería de Jesús. Los de Jémez devolvían el golpe, 1-1 y descanso.
La segunda parte comenzaba de maravilla para el Granada. Hernández Hernández decretó penalti de Juan Carlos sobre Success, que se quedó solo tras un gran pase con la izquierda de Rubén Pérez y un error en la entrega de Iturra. Pedían roja para el guardameta rayista, pero la sanción se quedo en cartulina amarilla. El-Arabi engañó y marcó su décimo gol en liga esta temporada, y el segundo en este partido. Partidazo del marroquí.
Los Cármenes disfrutaban con su equipo con las bufandas al aire. La afición nazarí cumplió el guión a la perfección. El Granada, sobre el campo, se iba sintiendo más cómodo con el paso de los minutos entre un ambiente espectacular.
Paco Jémez reaccionó inmediatamente al gol nazarí e introdujo en el campo a Manucho en lugar de Iturra, poniendo línea de tres centrales con Tito y Quini como carrileros. Manucho se ponía en punta.
A pesar del cambio ofensivo, el Rayo no creaba peligro, pero el Granada está nacido para sufrir y luchar. Una acción infantil de Success, que elevó el brazo más de lo permitido, provocó la segunda amarilla para el nigeriano y su expulsión. Los de González se quedaban con uno menos y más de veinte minutos de partido por delante (70’).
Peñaranda esperaba para entrar, probablemente por Success, pero las circunstancias obligaron a González a dar marcha atrás. El Granada se encerraba inevitablemente en busca de alguna oportunidad al contragolpe para poder cerrar el partido.
El Rayo se mudó al área de Jesús Fernández. Bebé lo intentó de todas las maneras. Tremendos disparos que no encontraron la red rojiblanca. Los jugadores rojiblancos comenzaron a sentir pinchazos buscando la pérdida de tiempo que parara el partido y les diera aliento.
Jesús Fernández tuvo que salvar a su equipo en el minuto 84 en un remate de Manucho a bocajarro en el área pequeña. La jugada comenzó con un claro fuera de juego del asistente rayista, que no pitó el línea.
El asedio de los madrileños encontró su premio en el minuto 86 tras una falta muy rigurosa sobre Pablo Hernández. El lanzamiento de la falta fue rechazado por la defensa nazarí, con la mala fortuna de que el rebote terminó en los pies de Zé Castro, que ponía el 2-2 en el luminoso de Los Cármenes.
El Rayo tuvo la victoria en dos ocasiones. Primero, Pablo Hernández lo intentaba en un disparo desde la izquierda que despejaba bien Jesús. A la siguiente jugada, era Embarba quien recogía un rebote sólo pero no acertaba a rematar en buenas condiciones.
Peñaranda tuvo una buena ocasión justo antes de terminar el encuentro, pero su disparo desde la frontal fue flojo y sin dirección.
El Granada sufrió hasta el final. No podía ser de otra manera. Los cinco minutos del tiempo extra se convirtieron en una eternidad para los nazaríes. Agotados físicamente y tocados en lo anímico. Los rojiblancos supieron aguantar estoicamente y al menos sumar un punto que no deja felices a ninguno de los dos equipos. Los Cármenes se quedaba helado, pero animaban a los suyos con aquello de “¡Sí se puede, sí se puede!.
FICHA TÉCNICA
Granada CF: Jesús Fernández; Foulquier, Babin, Ricardo Costa, Biraghi; Rochina, Rubén Pérez, Doucs (50’ Krhin), Isaac Cuenca (78’ Edgar); Success y El-Arabi (84’ Peñaranda).
Rayo Vallecano: Juan Carlos; Tito, Quini (72’ Ozbiliz), Zé Castro, Crespo; Iturra (52’ Manucho), Trashorras, Pablo Hernández, Piti (38’ Bebé); Embarba y Miku.
Goles: 1-0, El-Arabi (11’); 1-1, Pablo Hernández (45’); 2-1, El-Arabi (52’); 2-2, Zé Castro (86’).
Árbitro: Alejandro J. Hernández Hernández (Colegio de Las Palmas). Expulsó a Success por doble amarilla. Amonestó por parte del Granada: Ricardo Costa ; Y por parte del Rayo: Crespo, Quini, Juan Carlos, Zé Castro,
Observaciones: partido correspondiente a la jornada 30 de Liga BBVA disputado en el Estado Municipal Nuevo Los Cármenes ante 18.848 espectadores.