Las empresas de turismo rural del Altiplano de Granada sufren "los efectos negativos de las megaplantas de energías renovables"
La primera actividad económica en echar el cierre ha sido el vuelo en paramotor de los alojamientos rurales Cuevas Andalucía
Los principios en los que se basa el Geoparque de Granada, declarado Geoparque Mundial de la Unesco el 10 de julio de 2020, serán revisados nuevamente en el año 2024. Dichos principios consistentes en la geoconservación, divulgación y favorecimiento del desarrollo socioeconómico y cultural a escala local pueden verse truncados por "los megaproyectos de energías renovables, eólicos y fotovoltaicos que promueven las grandes empresas multinacionales y que son ajenas al territorio". Así lo ha indicado Lorenzo Reche, presidente de la Asociación de Turismo Altiplano de Granada, que aglutina a los empresarios del sector de las comarcas de Baza y Huéscar.
Para Lorenzo, “es difícil parar el modelo de transición energética, puesto que Europa nos lo está exigiendo, pero los ayuntamientos no deberían permitir los proyectos que puedan perjudicar a lugares turísticos, las zonas visitables o que puedan dañar a zonas sensibles como los badlands”. El presidente de la Asociación de Turismo aconseja "una planificación territorial por parte de las administraciones para compatibilizar estas instalaciones energéticas con el turismo rural y de naturaleza que prima en el Geoparque".
Uno de los empresarios más afectados, Sam Kheder, que regenta los alojamientos rurales Cuevas Andalucía, en el corazón del Geoparque, ha tenido ya que cerrar su negocio de vuelo en paramotor por la normativa de seguridad debido a que su zona de despegue y aterrizaje ha sido ocupada por la construcción de varias torres eléctricas de la línea de evacuación de la futura macroplanta solar Ququima y los parques eólicos, que conecta con la subestación de renovables de la línea 400 KV de Baza.
Kheder, muy crítico con los megaproyectos de renovables, ha puesto en venta su negocio turístico a pesar de llevar más de 12 años "luchando por el turismo sostenible en esta tierra" e "intentando que este paisaje tan característico sea apreciado y visitado por media Europa". El empresario ha lamentado que “nadie querrá visitar un paisaje industrial lleno de metal y cristal, vertedero de Europa, cuyo objetivo es vender la energía a Francia por el cierre de sus centrales nucleares ya amortizadas”.
También Kheder ha denunciado que las grandes empresas energéticas españolas "operan con sus filiales en paraísos fiscales, Iberdrola, Endesa, incluso Red Eléctrica Española (REE), promotora de la línea 400 KV, y que con el pago de nuestras facturas eléctricas financian estos megaproyectos que expolian la España Vaciada". "Para vencer a estas empresas, lo primero que hay que hacer es cambiarse de compañía de la luz,” ha sentenciado.
Por su parte, Rafael Azor, gerente del alojamiento troglodita Cuevas del Río Baza, en el barrio de Salazar, también se ha manifestado en contra de la fotovoltaica Ququima y del resto de plantas eólicas y ha indicado que “todas estas instalaciones industriales van a perjudicar el turismo por el impacto visual y no van a dejar nada en el territorio”. Según Azor, deberían "anularse todas las concesiones de energías renovables a las multinacionales de la línea 400 KV y asignar una reserva a la comarca de Baza para que los ciudadanos y empresarios locales puedan invertir en generación renovable y obtener algún beneficio para los pueblos". “En vez de repoblar la España Vaciada con personas, la están repoblando con chatarra”, ha lamentado Azor.
Los empresarios del sector turístico han echado en falta el apoyo de las administraciones a su sector y han resaltado la importancia del turismo en el Altiplano y Geoparque de Granada. "El impacto económico que crean con sus proyectos de turismo rural es desconocido para los políticos, los clientes van al supermercado, a la peluquería, a la gasolinera, a los pequeños comercios locales, al mecánico, los deportistas de aventura, etc. Si matamos nuestros proyectos turísticos, la economía local desaparecerá, los negocios se cerrarán uno tras otro, perderemos los servicios públicos y finalmente emigraremos”, ha señalado Kheder.
La promoción turística también es "una asignatura pendiente en el territorio" según los empresarios turísticos, que echan en falta muchos más carteles informativos, por ejemplo, en la autovía A-92, donde se anuncien "las infraestructuras turísticas que han recibido inversiones públicas para su puesta en valor". Por otro lado, consideran los parques eólicos pueden suponer, a su vez, "un despilfarro de dinero público". "Por ejemplo, en el cerro Jabalcón se han realizado fuertes inversiones en el mirador y en la zona de despegue de parapentes y de vuelo libre, sin embargo, si se instalan los aerogeneradores en sus inmediaciones, el turismo de vuelo libre se perderá por razones de seguridad y también habrán sido lapidadas las inversiones públicas para la puesta en valor de estos sitios turísticos", han asegurado.