En búsqueda de la regularidad ante el Linense
El Granada B demanda resultados positivos tras gestar afables actuaciones sin un premio que le contente
El Granada B se demora en la pesquisa de hallar regularidad esta temporada. Bajo sensaciones positivas de conjunto, los resultados no se adhieren a lo apetecible. Los hombres de Planagumà se enfrentan este domingo ante el Linense, club atado a la media-baja tabla en un grupo de movimientos impredecibles. Su reciente victoria ante el Melilla les da tregua de cara al choque en Armilla, en donde una hipotética derrota por parte local podría significar el regreso nazarí a los puestos de urgencia.
La frustración que conlleva no extraer premio del sacrificio suele derivar en la increencia de virtudes propias. Desempeñar un buen papel en la categoría pasa por desestimar a los augurios y confiar en la calidad individual y del compuesto, más aún si estas han sido explícitas en ciertos tramos del campeonato, ejemplo de ello la última jornada, donde se cayó con honor a domicilio contra el Jumilla. Ahora, la oportunidad de relanzarse pasa por vencer de nuevo en casa, como se hiciese hace dos jornadas frente al Villanovense, en un ejercicio claro de casta y creencia. La disposición del equipo es plena, salvo la ya conocida baja de larga duración de Jean Carlos y la ausencia de Matheus tras su expulsión en dominios murcianos.
Según Lluís Planagumà, técnico del filial, el rival atesora “un gran bloque defensivo, y con jugadores determinantes y rápidos que tienen capacidad de hacer gol”. Respecto al estado del plantel que comanda, ha indicado que “va siendo hora de que no concedamos tanto a los rivales, que no seamos tan ingenuos como en muchos situaciones hemos sido, porque eso hace que tengamos muchos menos puntos de los que merecemos”.