Ada Mar, protagonista de 'Secaderos': "No veo una vida en la que no sea actriz"
La chauchinera busca hacerse un hueco entre la nueva generación de actrices y actores que empieza a florecer en España
Granada ha sido recientemente protagonista de una de las películas expuestas en el Festival de San Sebastián. Secaderos trata la historia de los jornaleros de los campos de trabajo en forma de homenaje. Una profesión y una forma de vida que está cada vez menos presente en la Vega de Granada. A pesar de ser ciertamente fidedigna con lo que a este trabajo se refiere, también se incluye cierto toque de ficción que sirve para darle la vuelta a cómo ha tratado el cine lo rural en España, al tiempo que le permite a su directora, Rocío Mesa, darle su toque personal. Además, el hecho de que la gran mayoría del elenco sea no profesional le añade un toque de realismo y veracidad que es muy difícil de encontrar en las grandes productoras: el acento granadino. Una de esas nuevas actrices que han llegado a Donosti de la mano de Rocío Mesa es Ada Mar. Natural de Chauchina, llegó a la gran pantalla por primera vez en este nuevo filme y ha concedido una entrevista a GranadaDigital en el que repasa tanto sus inquietudes, como la experiencia de dar el paso a los cines y sus futuros proyectos.
P. Primero de todo, ¿de qué trata la película?
R. En la peli hay dos protagonistas. Una soy yo, la adolescente, y otra la niña pequeña. La adolescente vive en un pueblo que para ella es como su cárcel. Ella no quiere ser como su madre, tener hijas joven, vivir toda la vida en el campo... Mientras que, para la niña pequeña, como va de vacaciones, es como su paraíso. Para ella el campo significa amigos y pasárselo bien. La película se basa en la vida entre secaderos. Hay un monstruo, por lo que también se incluye ficción dentro de la propia película. Está basada en la actualidad, pero introduce muchos elementos del pasado. Mi propio padre, al ver la película, me dijo que muchas cosas que salen él mismo las hacía cuando era joven. Es actual, tenemos móviles, en general es contemporánea, pero introduce muchos elementos de los años setenta u ochenta.
P. Rocío Mesa, directora de la película, ha recibido recientemente un premio, el Dunia Ayaso. ¿Cómo ha sido trabajar con ella?
R. Trabajar con ella ha sido increíble. Es joven y se entiende a la perfección con nosotros, nos ha llevado de la mano todo el rato y ha sido como una 'mamá' para nosotros. Volvería a trabajar con ella mil veces, ella me ama y yo también, ojalá poder tener la suerte en el futuro de encontrarme con directores iguales que ella. Seguro que me la encuentro más veces, no es solo directora, también produce, así que espero encontrármela en otros proyectos.
P. Y usted, personalmente, ¿tiene pensado seguir adelante con la gran pantalla? ¿Lo ve como una afición o como un modus vivendi?
R. Yo quiero dedicarme al mundo del cine y las series. Mi sueño siempre ha sido ser actriz, y no he visto una vida en lo que no lo sea. El mundo del cine es muy duro y si, por ejemplo, tengo una época en la que me salga nada, trabajaré en algo que me de de comer pero siempre enfocada en la actuación. Desde pequeña. Cuando veía Disney Channel pensaba "yo tengo que estar ahí". Veía que se lo pasaban tan bien y pensaba que yo también quería. Ahora estoy estudiando arte dramático en la Remiendo Teatro de Granada y, al ser un curso de tres años, hacemos funciones cada cierto tiempo y estoy encantada.
P. ¿Cómo acabó siendo una de las protagonistas? ¿Lo descubrió por casualidad, lo buscó...?
R. Fue más casualidad. Yo estaba en segundo de Bachillerato, en 2020, mitad de pandemia, y mi profesora de Artes Escénicas nos mandó el casting. Yo lo hice sin tener ni idea, por probar, y al año siguiente me llamó mi madre gritando para decirme que había entrado en la preselección. Acudí al casting con mi madre, con cero expectativas. Fui pasando cortes y castings y más castings, les gusté y la directora, que estaba sentada delante mía sin yo saberlo, me saludó más efusivamente de lo normal. Le gusté. Ahora es una anécdota entre nosotras. Efectivamente ese saludo fue porque habían encontrado en mí a la protagonista. Cuando me lo dijeron no sabía ni cómo reaccionar. Me acuerdo de cuando llamé a mi madre para decírselo. Uno de los conceptos más guais es que nosotros teníamos el guion como base, nos ponían una situación y era todo improvisado. Por ejemplo, la directora nos decía: "Tenéis que hablar de este tema". Y lo hacíamos. Salía todo más natural.
P. Ha estado hace poco en el Festival de San Sebastián presentado su película. ¿Cómo ha sido la experiencia?
R. Fue superemocionante. Al principio no era consciente. Me metí en el taxi con un montón de actores conocidos y pensé: "Esta es la vida que me toca vivir". Ya el día grande, el de entrevistas, no había tiempo ni para los nervios. Teníamos un montón y la ciudad estaba colapsada, no había taxis. Luego, la alfombra roja, cuando vimos las cámaras delante de nosotros no miramos y dijimos: "¿Esto qué es? Y ya llegar a la sala, empezar a ver la película proyectada y ver que sale tu nombre... Muy fuerte. Todo el rato llorando, era una emoción impresionante. Cuando terminó la peli yo no quería llorar, pero en ese momento todos los focos apuntan hacia ti. Se acercó mi madre y mi padre llorando y yo ya me hinché a llorar delante de todo el mundo. La gente que estuvo destacaba que me quité los zapatos porque, claro, toda la peli ahí, con los tacones... Luego salimos al escenario a hablar sobre la película, sobre todo Rocío. En general el día fue espectacular, inolvidable.
P. Después del día de la emisión, llega el de las críticas. La gran mayoría son muy buenas. ¿Cómo ha sido leerlas?
R. Leer a críticos de cine y, sobre todo, gente de a pie que va a San Sebastián, un festival de cine, y digan que les gusta es fantástico. Leí a uno decir que era la película de su vida. Es impresionante.
P. ¿Cómo fue para usted enterarse de que iba a acudir al festival de cine más grande de España con la película que protagonizaba?
R. Increíble. De hecho fue el día de mi cumpleaños. Fuimos a las Fiestas de Romilla [localidad perteneciente al municipio de Chauchina del que es natural], nos lo pasamos genial, volvimos andando hasta Chauchina y, cuando llegamos, a las nueve de la mañana, me escribe la directora: "Felicidades, Ada. ¿Quieres que te dé un regalo?". Le dije que adelante: "Vamos a presentar la película en el Festival de San Sebastián". Y yo no me lo creía. Mis padres estaban durmiendo y les levanté corriendo para decírselo. Y mantener el secreto fue también muy difícil, pero una vez hecho oficial, llegaron las felicitaciones de mis amigos y todos muy contentos.
P. Y volviendo a la película en sí. Es una de las primeras que trata la España rural desde el punto de vista de la mujer. ¿Cómo de importante considera que es que esto se generalice y se empiecen a contar también estas historias?
R. Los tiempos están cambiando. Mi película va sobre los secaderos de tabaco y siempre se han visto desde el punto de vista del hombre, cuando las mujeres también han tenido un papel muy importante. Quizás no los mismos trabajo, pero sí igual de importantes. Siempre han estado ahí y me alegro que ahora se esté visibilizando. La abuela de una de las protagonistas vivió el trabajo en los secaderos en primera persona y es muy emocionante escucharla. Mi madre también. Es un trabajo durísimo y es muy importante que ahora se les reconozca.
P. ¿Cuándo podremos ver la película en Granada?
R. Sé que se va a estrenar, pero no puedo decir mucho más. Antes de que acabe el año seguramente la tendremos. Es la primera película grabada con acento granadino, directora de Granada... Todo 'Graná', 'Graná', 'Graná'. Entonces tiene que venir.