Ana Müshell, autora de 'Maldita Alejandra': "Granada tiene algo que te incita a crear obra"

La escritora e ilustradora, residente en la ciudad, pide que la salud mental "deje de ser un tabú" e invita a que se hable sobre ello en la educación primaria

Entrevista a Ana Mushell en Granada
Ana Müshell, autora de 'Maldita Alejandra' | Fotos: Antonio L. Juárez
Quique Briz Farran
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Es jerezana de nacimiento, pero reside en Granada desde hace ya varios años. No se esconde, es valiente y habla con naturalidad. Es Ana Müshell, ilustradora y autora de obras sobre temas como el miedo o la ansiedad. Cree que la salud mental debe normalizarse en la sociedad y propone introducirlo en la educación primaria para que deje de ser un tabú. Su último libro es Maldita Alejandra, que gira en torno a la vida de la poeta argentina Alejandra Pizarnik. Habla de su nueva obra en esta entrevista con GranadaDigital.

Pregunta: ¿Cómo ha llegado hasta Granada?

Respuesta: Soy de Jerez y estudié Bellas Artes entre Sevilla y Madrid, aunque quise especializarme en Diseño Editorial. Hice un máster aquí y me quedé porque me sentí muy cómoda. En seguida empecé a trabajar en el diseño, pero vi que no me llenaba y que no estaba cómoda. Por eso decidí apostar por el mundo de la ilustración. Al principio fue un trabajo amateur, pero me empezaron a llegar pequeños trabajos editoriales como portadas de libros. Trabajé también para la revista GQ, que fue para mí un paso grande, y he colaborado con marcas como Zara, Amazon o Coca-Cola. A nivel editorial he realizado un trabajo más personal.

P: ¿Cuándo empezó su trayectoria como autora?

R: En 2017 publiqué mi primer libro, Pink Mousse, y seguí con la biografía ilustrada de Patti Smith. Tuve la oportunidad de colaborar con la guionista y humorista Ainara Álvarez para ilustrar su primer libro, La mala leche. Finalmente, ha llegado Maldita Alejandra, mi libro más personal.

P: ¿Por qué se quedó en Granada? ¿Qué le une con ella?

R: Madrid no era una ciudad que sentía que me acogiera. En Granada es donde más cómoda me he sentido y me ha ayudado muchísimo a superar ciertos miedos y fobias que mi estado de ánimo tenía. Decidí quedarme aquí porque estoy muy a gusto.

P: ¿Puede ser esta ciudad una fuente de inspiración para dibujar y escribir?

R: Granada ya me ha servido para conectar con otros artistas, ilustradores y escritores. Tiene una oferta cultural muy buena, algo que te expande y te incita a crear obra. Como ciudad en sí, creo que es imprescindible sentirse cómodo donde vives para poder desarrollar tu obra personal.

P: Alejandra Pizarnik, la poeta  en torno a la cual gira el libro, tiene una historia trágica. ¿Cómo fue la elección de esta autora argentina?

R: Yo tenía la intención de hacer un libro muy íntimo. En un principio quería escribir sobre varias autoras fantasma. Personas que ya están muertas pero que me han inspirado mucho. Sobre la mesa tenía a Anaïs Nin, Sylvia Plath, Virginia Woolf, Djuna Barnes y Alejandra Pizarnik. Pero con el tiempo que tenía, era mejor centrarme en una. Como Pizarnik es de la casa Lumen, la editorial del libro, decidí quedarme con ella. Su historia es trágica, pero su obsesión por el trabajo y la palabra es lo que a mí me ha servido.

P: ¿Cómo la describiría?

R: Es el personaje que ella construyó en base a su literatura. Desde pequeña, antes que se diese cuenta, tenía muy profundizado el tema del dolor y de la muerte. Era una persona que a veces podía ser muy divertida y muy amiga, mientras que otras veces entraba en un estado de oscuridad que llevaba con ella a todas partes. Eso hacía que se concentrase mucho en la palabra y la poesía. Hay varias 'Alejandras' dentro de una misma.

P: ¿Cómo ha sido el proceso de escribir el libro?

R: Ha sido un proceso lento, arduo y difícil. En un principio, mi editora me propuso un libro y yo no sabía qué contar. Tardé mucho en dar con una idea clave, y a ello hubo que añadir el tiempo de investigación. Alejandra Pizarnik es un personaje complejo, a pesar de vivir solo 36 años. Tiene mucha profundidad y me ha costado mucho llegar a ella. Ha sido un proceso lento, pero al mismo tiempo lo he disfrutado mucho, especialmente toda la parte de ilustración y la parte de traducir su mundo y el mío. Estamos todos muy felices con el resultado.

P: ¿Cómo fue la elección de la poeta Luna Miguel para escribir el prólogo?

R: Realmente, lo ha elegido la editorial Lumen. Luna Miguel es un reclamo máximo para muchas generaciones, tanto por su poemario como por sus ensayos. Para mí es un honor que el prólogo lo haya escrito Luna. Se ha involucrado mucho en Maldita Alejandra.

P: En sus libros, trata temas como el miedo o la ansiedad. ¿Qué es lo que le mueve a escribir sobre estos temas?

R: Me gustaría que el tema de la salud mental dejara de ser un tabú, y creo que lo estamos consiguiendo. En mi círculo hablamos con total libertad de problemas psicológicos, de ansiedades, depresiones e incluso fármacos. Pero es algo que todavía cuesta decir. Este libro me motivaba, en primer lugar, por drenar los problemas que he sufrido durante esa etapa, y segundo, por las personas que no se atreven a pedir ayuda. Si ven el libro y que hay una normalidad sobre el tema, que se animen a poner palabras a lo que sufren.

P: ¿Cree que los lectores de Maldita Alejandra pueden curarse las heridas de los temas que trata?

R: No creo que un libro pueda ayudar a sanar tus propios males, cada uno tiene su historia y su infancia. Cada persona necesita una terapia individual y específica. Yo me centraba en el tema de la agorafobia, algo que padezco. Sí que creo que, tratándolo con normalidad, las personas que lo lean pueden encontrar un poco de refugio y compañía en ciertas partes del libro.

P: ¿Qué mensaje daría a aquellos lectores que se ven un poco reflejados con su obra?

R: Sobre todo, que se animen a ir a terapia y a ver su problema con normalidad. No es fácil, porque a la sanidad pública le está costando que la gente pueda ir a terapias muy caras. Las personas que sufrimos este tipo de fobias y ansiedades no comprendemos todavía cómo en el colegio no enseñan a defenderte y a reconocer ciertas evidencias cuando tienes un mal psicológico. Tampoco entendemos cómo no hay un acceso a una salud mental necesaria. Sé que no es fácil. Dentro de lo que cabe, animo a tomar a la gente esa decisión tan natural y tan necesaria.

P: ¿Queda mucho por hacer en el tema de la salud mental?

R: Es un tema del que, desde muy pequeños, deberíamos ser todos conscientes. Debería existir una asignatura en el colegio que enseñase que puedes sentir ansiedad, y cómo trabajarla. Sería muy bonito que llegase a la educación primaria.

P: Usted misma ha ilustrado su propio libro. ¿Cómo ha sido realizar ese trabajo?

R: Depende de cada ilustración. Hay partes muy literales, pero también las hay más complejas. Con el surrealismo de Pizarnik quise jugar un poco y hay ilustraciones que son más libres de significado. Me gusta que el que se enfrente a ellas se pierda y disfrute tanto como yo en sumergirse en ellas. Hay algunas que me llegaron muy rápido y otras que me costaron un poco más, pero disfruté mucho. Es otra manera de contar la historia.

P: ¿Ha costado su tiempo?

R: Sí, hay algunas que tenía claras desde el principio y que surgieron rápido. Pero me ha tomado muchísimo tiempo, el que necesita. Por culpa de ciertas autoexigencias, casi no llego a la fecha de entrega.

P: ¿Después de escribir Maldita Alejandra, tiene en mente otros proyectos para el futuro?

R: Ahora mismo tengo otros proyectos en mente con otras editoriales. Pretendo disfrutar de este libro para ver adónde me lleva, pero sí que hay sobre la mesa otros proyectos. Hasta ahí puedo contar.

P: ¿Qué le diría a aquellos y aquellas que quieren sacar un libro o ilustrarlo?

R: Yo soy ilustradora, pero para este proyecto Lumen me ha permitido hacer la tarea de escribir. La editorial apostó por mí, por eso salió adelante. Si no tienes ese apoyo, cuesta mucho autoeditar y volcarte en un proyecto que no sabes si va a salir. En este caso, yo sabía que iba a salir y eso te motiva. Este mundo es muy precario y complicado, pero animo a la creatividad.