Los escape room granadinos se reivindican como espacios seguros frente al Covid-19
El sector busca salida a la crisis económica derivada de la pandemia, que ha mermado sus ingresos hasta en un 80%
Hasta que se decretó el estado de alarma, los escape room aparecían como una de las ofertas de ocio más prometedoras en España. Las últimas cifras registradas se situaban al mismo nivel que el cine o el teatro. Sin embargo, la crisis sanitaria ha golpeado con fuerza a este sector que ahora trabaja para reiniciar su actividad con el objetivo de recuperar paulatinamente el ritmo de crecimiento que experimentaban antes de la pandemia; para ello, se han tenido que reinventar, han adecuado su modelo a las nuevas exigencias sanitarias y algunos, incluso, han desarrollado productos innovadores adaptados a esta ‘nueva normalidad’.
El negocio de los escape room en Granada es relativamente joven, comenzó a dar sus primeros pasos en 2017. Si bien, su popularidad ha ascendido exponencialmente en los últimos años. Antes de que irrumpiese la crisis del coronavirus, vislumbraban un horizonte alentador. Tal y como cuenta Sandra, propietaria de ‘El Reino’, el mes de marzo lo tenían completo y, a partir de que se decretara el estado de alarma, se produjo un alud de cancelaciones que les desestabilizó económicamente. Algunos de los propietarios de estos locales han decidido condonar parte del alquiler para aliviar las consecuencias derivadas de la crisis. “Gracias a la buena voluntad de los propietarios hemos podido seguir abiertos, de otra manera hubiéramos tenido que cerrar puesto que las pérdidas han sido irreparables”, apunta Sandra.
Desde el punto de vista económico, el cierre de los locales ha supuesto una catástrofe para estos empresarios que han visto reducidos sus ingresos hasta en un 80% y no han contado con ninguna subvención por parte del Gobierno, según detalla Diego, copropietario de Lock-In. “Para cubrir gastos necesitamos 100 clientes y ahora mismo no llegamos ni a 10”, añaden desde Neptuno Escape. Sin embargo, dentro de lo que cabe, han sido afortunados. Otros establecimientos como Skate Park no han sobrevivido a 'la guillotina' del Covid-19. “Nosotros hicimos una gran inversión para apostar por salas grandes que albergaran grupos amplios, teníamos todo reservado durante los próximos meses, el negocio marchaba, pero ahora no sabemos qué va a pasar. Esperaremos hasta septiembre a ver si remonta y, si no, habrá que cerrar, puesto que el alquiler que pagamos es alto, y nuestro arrendador es una entidad bancaria que no perdona un céntimo”, expresa Ernesto, copropietario de Neptuno Escape.
Otras empresas han tenido que dar un giro de tuerca de 180 grados, es el caso de Escape Mistery Box, una compañía que decidió apostar por una alternativa distinta en la que se prescinde de los espacios físicos cerrados. Este modelo es conocido como ‘escape exportable’ y consiste en desarrollar un juego de escape por la ciudad, mediante el uso de una aplicación móvil y una hoja de ruta.
Medidas de higiene
En cuanto a las medidas de higiene, explican que están basadas en un protocolo de actuación preparado entre todas las salas de escape de España, ya que desde el gobierno no recibieron instrucciones específicas sobre cómo operar. Se ha impuesto la utilización de geles hidroalcohólicos antes de acceder a cada sala; la utilización obligatoria de mascarilla; esterillas especializadas de desinfección en la entrada; luego, las pertenencias se depositan en taquillas debidamente higienizadas; todos los objetos se limpian con virucida después de cada actividad; y, además, se ha ampliado a dos horas el tiempo entre sesiones para que no se crucen los grupos. “En base a estas medidas consideramos que es una de las ofertas de ocio más seguras actualmente en España”, constata Sandra.
Sobre de las decisiones tomadas por el Gobierno acerca de los lugares de ocio, Eva, propietaria de Coco Room, considera que han sido injustas y añade: “Creo que no se pueden aplicar las mismas restricciones en un restaurante y en un escape room, debido a que el riesgo aquí es mínimo, ya que no compartes espacio con gente de fuera de tu núcleo, que son con los que se viene a jugar y a interactuar. Como enfermera, sé dónde está el riesgo y dónde no, y creo que los escape room son una opción segura porque se aplican todas las medidas de seguridad sanitarias requeridas y los espacios cuentan con la suficiente ventilación".
Perspectivas de futuro
No obstante, se muestran positivos para los próximos meses. La mayoría cree que con la llegada de los estudiantes el negocio irá de nuevo recuperando popularidad. Desde Cubical Room admiten que la situación ha sido muy cruda, pero al mismo tiempo lanzan un mensaje prometedor: “Estos meses no han sido fáciles, pero tenemos esperanzas de que mejore con el tiempo. Poco a poco vemos como la gente se va animando, están reaccionado bien, creo que se va a perder el miedo progresivamente y el sector va a verse de nuevo impulsado”.
Diego declara que entre todas las salas de escape en Granada hay muy buena química. Gracias a ello, con el propósito de reactivar la actividad, han dado vida a una idea apodada como la ‘Ruta de las siete llaves’. Un proyecto que guarda una sorpresa para aquel atrevido escapista que consiga superar cada uno de los siete locales que aparecen en la lista. Los empresarios aseguran que su ilusión se mantiene intacta, animan al público a participar en sus actividades pensando en el ocio como un elemento esencial para la sociedad, pero priorizando siempre y, por encima de todo, la seguridad de sus clientes.