"El esfuerzo y la constancia son los pilares de la vida"
A sus 18 años, Pepe García es la viva imagen de que el trabajo duro conduce a la superación de las barreras que cada uno se pone
Hay personas que, desde que nacen, están destinadas a marcar la diferencia y a ser guías y ejemplos para otros tantos. Es el caso de Pepe García, un joven que, con tan sólo 18 años, ya tiene mucha historia que contar. Este gabirro cursa 2º de Bachillerato en la modalidad de Ingeniería, 4º de profesional en el Conservatorio de Música en la especialidad de piano y practica esquí alpino de alto rendimiento. Un chico muy completo, que, por si fuera poco, se está preparando para presentarse al nivel C1 de Inglés y que en el colegio estudia también alemán. Actualmente, a Pepe le encantaría dedicarse en un futuro profesional a la música, aunque la informática es otro sector que le llama la atención.
Los 'problemas' físicos que Pepe tiene de nacimiento nunca han sido verdaderos problemas para él. "Tengo los brazos más cortos, menos dedos, en el brazo derecho me faltan huesos... Y, aparte, tengo problemas en la vista: por el ojo derecho no veo absolutamente nada y por el izquierdo tengo poco resto de visión, ya que tengo problemas como la miopía y un coloboma", explica el joven. A sus espaldas carga ya con varios premios: "En la temporada 2020/21 quedé subcampeón de España de esquí alpino en la modalidad de Gigantes y el pasado mes de diciembre, el Instituto Nacional de Juventud (Injuve) me dio el Premio Nacional de Juventud en la modalidad de Cultura por mi trayectoria musical", al que le habían apuntado desde el Ayuntamiento de Las Gabias.
Una vida repleta de sorpresas
Pepe García no se imaginaba de pequeño hasta dónde sería capaz de llegar. Además, muchas de las situaciones que ha ido viviendo a lo largo de su carrera, tanto musical como deportiva, han surgido de repente.
Cuando tenía seis años, una compañera de su clase tocaba el piano y él se fijó en ella, por lo que pidió a sus padres que le apuntaran a clase de piano. Fue entonces cuando sus profesores descubrieron en Pepe un talento que hasta entonces había permanecido oculto. "Yo me esforzaba por trabajar más y por seguir y mi profesora de Música, Isa, me dijo que quería que me inscribiera en el Conservatorio", cuenta. Ella le presentó a Javier Herreras, un gran pianista que le aseguró que "nunca había visto nada así" y que fue su mentor, junto con Isa, para prepararle para las pruebas de acceso, consiguiendo finalmente entrar hace ya cuatro años.
Este joven es activo en redes sociales y sube vídeos suyos tocando el piano, entre otro contenido, tanto a Youtube como a Instagram. Su vida dio un vuelco cuando unos amigos suyos mandaron uno de sus vídeos a Alejandro Sanz, quien meses después lo publicó en su propio perfil de Instagram, acompañado de unas bonitas palabras dedicadas a Pepe. "Me acuerdo perfectamente que ese día salí del Conservatorio y vi que me empezaron a subir los seguidores en Instagram, pero a cien por segundo, ¡se me quedó hasta pillado el móvil!", exclama divertido. Asimismo, esos amigos le mandaron también ese vídeo a Pablo López y el artista malagueño invitó a Pepe a su concierto en el Palacio de Congresos del pasado mes de septiembre. "Después del concierto, a la salida, vinieron a buscarme personalmente para que fuera a su camerino y no paraba de darme abrazos", declara emocionado el joven.
"En el esquí comencé porque mi profesor de Educación Física, Juanfra, nos llevó a la Sierra durante una semana en la que vinieron los padres y me gustó", dice. Hace tres años que Pepe comenzó a competir con la Federación Española de Deportes para Personas con Discapacidad Física (FEDDF) y en diciembre consiguió, tras años de búsqueda, un guía propio, Javi, porque "en el esquí para ciegos es muy importante tener un guía con el que compenetrarse mediante un intercomunicador, además de entrenar y participar con él", según indica el joven, quien añade que ahora entrena "todos los fines de semana con él" y cree que todo eso ha hecho que quedara subcampeón de España, aunque tiene una lesión en la rodilla y "podría haber obtenido una mejor marca". Porque esa es otra, Pepe es una persona que se exige mucho para dar lo mejor de sí mismo, según lo define su madre, Pepi.
Esfuerzo, constancia y trabajo
Pepe lo tiene claro, y siempre lo ha tenido desde pequeñito: la clave al hacer las cosas que a uno le interesan es no desanimarse. "Muchas veces, cuando la gente empieza a hacer un deporte o tocar un instrumento, por ejemplo, o en general, cuando hacen cualquier actividad que los saca de su zona de confort, en el momento en el que ven un pequeño obstáculo, se echan atrás y sus primeras palabras son 'No voy a poder', 'Esto no es lo mío', y no podemos pensar así. Si pensamos toda nuestra vida que no vamos a poder hacer las cosas, no vamos a vivir a gusto", comenta de forma contundente Pepe, y continúa: "La vida es dura, pero hay que esforzarse. Hemos venido aquí a esforzarnos, a trabajar y a hacer las cosas que queremos a base de trabajo duro".
"La vida es dura, pero hay que esforzarse"
Este joven de Las Gabias finaliza su mensaje más ejemplar con tres fundamentos: "Todo se consigue con esfuerzo, todo se consigue con constancia y todo se consigue con trabajo y con querer las cosas de verdad". Así, Pepe, con sus 18 años y una madurez desbordante, es todo un ejemplo de superación al que ver en directo tocando el piano pone los pelos de punta y hace brotar las lágrimas de cualquiera, hasta de una servidora, que ha tenido el honor de disfrutar de un mini concierto en privado, como se puede ver en el vídeo que acompaña a este reportaje, disponible en el canal de Youtube de GranadaDigital.
Comentarios
Un comentario en “"El esfuerzo y la constancia son los pilares de la vida"”
Luis Miguel Uribe
9 de mayo de 2021 at 13:30
VAYA LECCIÓN QUE LE DISTES A LOS JÓVENES !!.
Enhorabuena y sigue así EJEMPLO de mucho.
¡¡ GRACIAS !!