España, entre los países de mayor riesgo climático
La contaminación del aire provoca enfermedades crónicas, y es una situación que se está saliendo de nuestras manos
Factores como la contaminación y los cambios climáticos han forzado unas lamentables circunstancias globales que necesitan de nuestra atención inmediata. España se sitúa como uno de los países de mayor riesgo climático, relacionado a un invierno tardío y valores altos de contaminación que cobran más de 432.000 muertes anualmente.
Las consecuencias del cambio climático en nuestro país han ocasionado un impacto demoledor en las cosechas. El invierno ha llegado tarde, y aunque resultaron agradables para los que viven en la ciudad deleitarse con unos calurosos últimos meses del año, en el campo, las flores que no recibieron la acumulación de horas de frio necesarias, puede que no otorguen una buena cosecha. Se conoce de casos como el del estado de California, donde vivieron un panorama similar en 2014, y obtuvieron una bajada del 30% en el nivel de producción.
Un invierno como el que se vive en la actualidad no había ocurrido en décadas. Los agricultores no quieren todavía augurar un desastre, pero se muestran preocupados por la situación actual. Cosechas como la del olivo se han visto afectadas, pues necesita que las temperaturas bajen gradualmente para endurecerse y preparar las hojas para la nevada.
La siembra de cereales también es un tema fuera del control de los agricultores. Algunos han optado por sembrar antes, exponiéndose a las posibles nevadas, otros han optado por esperar, apostando lo mejor a una primavera posiblemente lluviosa. La realidad es que de alguna u otra manera las cosechas y hasta la ganadería sufrirán, solo queda ver cuáles serán los resultados finales de los cambios climáticos.
Por otro lado, en las ciudades europeas estamos rozando casi el medio millón de muertes anuales debido a la contaminación, solamente en España, se estiman alrededor de 27,000. Eventualmente este número puede llegar a duplicarse en el año 2050, conforme sigue en aumento la población urbana, la quema de carbón, producción de energía y calor mediante el uso de madera, y el uso del petróleo para movilizarnos.
La contaminación del aire provoca enfermedades crónicas, y es una situación que se está saliendo de nuestras manos. Es necesario tomar acciones inmediatas pues no solo es responsable del asma o neumonía, actualmente se le atribuye la provocación de enfermedades cardiovasculares e incluso casos de demencia.