Falta de consenso con la movilidad de Granada

La modificación de las líneas de bus está creando tensión en el Ayuntamiento de Granada. Los grupos de la oposición ya plantaron al equipo de gobierno en un pleno extraordinario que tenía como objetivo dar cuenta de las respectivas modificaciones en el plano urbano de la ciudad. El motivo que dieron los partidos políticos para abandonar el pleno fue que "no contaba con garantías " ya que no se presentó a los distintos grupos "ni expediente, ni informe técnico, ni memoria de gestión”.

La tensión volvió este miércoles al Consistorio. Tras la convocatoria del Observatorio de la Movilidad para dar cuenta de los cambios, todos los grupos políticos han mostrado de nuevo su desacuerdo al no contar con expediente, ni con representación de distintos colectivos implicados en el futuro de la movilidad de Granada. Además, Ciudadanos y la concejal no adscrita Pilar Rivas han echado en cara a la concejal de Movilidad que quiera aprobar esto en Junta de Gobierno Local, cuando el PSOE gobierna en minoría" y se debería hacer en pleno con el consenso del resto de grupos.

Ante las acusaciones de los distintos portavoces, la concejal de Movilidad, Raquel Ruz, ha señalado que este primer documento "se tramitará como expediente y se aprobará según la fórmula adecuada que determine el secretario del Ayuntamiento de Granada, ya que estamos ante un documento abierto a cambios". Y es que, según Ruz, el documento propuesto se ha hecho a través del "consenso con distintos colectivos vecinales" y "a través del análisis de 100.000 viajes analizados".

Finalmente, el Observatorio de la Movilidad se dio por concluido sin el compromiso por parte del Ayuntamiento de dar plazos y con el malestar de los grupos políticos por haber tenido la palabra "solamente" en dos turnos de cinco minutos.