La falta de lluvias y las altas temperaturas mantienen a Granada en alerta por niveles extremos de polen

La llegada de las alergias es una realidad. En los últimos días se puede observar como cientos de personas ya tienen que lidiar con las incomodidades que producen los ojos llorosos, el moqueo, la tos y los estornudos constantes. Las altas temperaturas han hecho acto de presencia en las últimas semanas, favoreciendo a la floración de las plantas y siendo este un factor que perjudica claramente a los ciudadanos que padecen una especial sensibilidad a este tipo de partículas.

Tal y como se puede comprobar en la Red Española de Aerobiología de la Universidad de Córdoba, y según ha informado la Universidad de Granada, la ciudad soporta niveles extremos en lo que a la presencia de polen en el aire se refiere, concretamente el del ciprés. El pasado fin de semana, la provincia registró unos niveles de polen superiores a los 2.000 granos por metro cúbico, una medida que se mantiene durante toda la semana.

La temporada de las alergias ha entrado pisando fuerte y es que cada vez son más los ciudadanos que padecen algún tipo de afección a causa del polen. Actualmente, más de ocho millones de españoles son alérgicos, según datos de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica, un dato que aumenta con una preocupante facilidad. Según detalla la doctora Carolina Mérida Fernández, especialista en Alergología del Hospital Universitario Clínico San Cecilio de Granada, “desde hace varios años venimos notando un aumento en la prevalencia de la alergia al polen de las ‘Cupresáceas’. Estos son árboles y arbustos cuyo polen es capaz de producir alergia a nivel ocular, nasal y respiratorio. Los más frecuentes son el ciprés, la arizónica, el enebro, la tuya y el cedro, debido a su mayor uso como planta ornamental”.

El cambio climático y su incidencia directa en el calendario polínico

La facultativa del hospital granadino explica que los niveles altos de polen de ciprés sí que son habituales para las fechas actuales, de hecho “este año este tipo de polen se ha retrasado unos diez días respecto a años previos”. Sin embargo, según apunta la UGR, a diferencia de otros años, el polen del plátano de sombra sigue en niveles muy bajos, posiblemente provocado por las bajas temperaturas que se registraron en febrero, afectando directamente a la floración y retrasando su proceso.

“El aumento de las temperaturas y la ausencia de lluvias puede hacer que se adelante la polinización de plantas que habitualmente polinizan más entrada la primavera, como las gramíneas. El hecho de tener durante muchos meses temperaturas primaverales hace, además, que se prolongue la estación polínica”, señala Carolina Mérida.

Las temperaturas tan elevadas que se han experimentado en estas últimas semanas, poco habituales para el mes de marzo y la ausencia de lluvia también afecta a la contaminación atmosférica. Al no llover, los granos de polen permanecen por más tiempo en el aire, afectando de forma más directa y agresiva a las personas alérgicas. En el caso de que las buenas temperaturas continúen y las precipitaciones no aparezcan, “sí que podrá ver un adelanto de la polinización de las gramíneas y del olivo”.

Alergias más frecuentes en Granada

La incidencia de los diferentes tipos de polen varían en función de la zona geográfica de la provincia. Los tipos polínicos alérgenos más frecuentes en Granada son los del olivo, con un 34% del total de tipos polínicos presentes en la atmósfera; los cipreses (33%) y el plátano de sombra (5%). En un menor porcentaje aparecen las parietarias (6%) y las gramíneas (3%).

En el caso de la Costa Tropical, “la alergia más prevalente es a los ácaros del polvo, mientras que de los pólenes destaca la parietaria. En la zona Norte de la provincia, es más frecuente la sensibilización al polen de artemisia y chenopodiaceas”, apunta la experta en Alergología del Clínico San Cecilio.

Recomendaciones para el control de los síntomas de la alergia

Una vez aparecen los síntomas derivados de la alergia, es vital conocer cómo conseguir que su repercusión sea extremadamente grave. La especialista en Alergología del Clínico San Cecilio hace varias recomendaciones para aquellas personas que, en estos momentos, pasen por su peor época del año.

“La recomendación más importante es la prevención. Lo ideal es usar mascarilla y gafas de sol, así como limitar las salidas a determinadas zonas en días de máxima polinización o evitar la realización de deporte al aire libre. Es importante consultar los niveles de polen y sus previsiones”. Para aquellos que requieran de esta información, se puede localizar en la estación aerobiológica del Departamento de Botánica de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Granada.

Carolina Mérida también hace hincapié en los diferentes síntomas que experimenta una persona alérgica. “En el caso de los estornudos o el moqueo, sino se controla con antihistamínicos o se necesita tomarlos a diario, y si aparecen síntomas de asma, se debería solicitar la valoración de un alergólogo para que pudiese prescribir una inmunoterapia específica, es decir, las conocidas como vacunas de la alergia”.