La familia de Fernández Noguera, el joven encontrado sin vida, denuncia la investigación llevada a cabo
Sus padres cuentan a GranadaDigital que tuvieron que contratar detectives privados ante la falta de información por parte de la Guardia Civil
El desenlace del joven de Alhendín que desapareció en Granada se resolvió el sábado por la mañana, cuando encontraron el cuerpo de Nacho sin vida -sin signos de violencia- en el interior de su vehículo en una finca de la localidad granadina de La Malahá. Sus padres, Eduardo y Raquel, contaron hace unas semanas a GranadaDigital que "la última noche en la que varios testigos aseguraron ver a Fernández Noguera fue en las inmediaciones de la discoteca Mae West", mientras conducía su coche. El padre del joven aseguró que el móvil de Nacho "dejó de rastrearse en la Facultad de Traducción el pasado 24 de agosto, cuando a las tres de la madrugada recibió una llamada, y de manera inmediata, se le perdió el rastro".
"Cuando encontraron el coche de nuestro hijo no lo precintaron, ni siquiera se lo llevaron del sitio. Fue gracias a la funeraria cuando lo localizamos a través de un contacto familiar y nos lo tuvimos que llevar de allí por nuestra cuenta", cuenta Eduardo. Apenados por la pérdida reciente de su hijo, sus padres critican que la investigación "ha carecido en todo momento de transparencia", pues a Eduardo y Raquel les atendían siempre fuera del cuartel y "nunca" les dejaban entrar.
El padre del joven señala que tuvieron que "contratar a varios detectives privados ante la falta de noticias por parte de la Guardia Civil", que llevaba el caso. "No han colaborado en nada, a su disposición hemos puesto amenazas por parte de la familia de su expareja y tampoco hemos recibido respuesta al respecto", asegura. La Benémerita les llegó a decir que los tenían como "pollos sin cabeza", pero ellos solo querían encontrar a su hijo.
Conforme pasaron los días, los padres, amigos y familiares cercanos buscaron sin cesar al joven, hasta que el sábado por la mañana el dueño de una finca de La Malahá llamó a la Guardia Civil. A juicio de la familia, "sabían de la compra de una alcachofa y una bombona de butano". Ahora solo desea "recuperar las pertenencias" de su hijo.
Por su parte, fuentes del Instituto Armado han confirmado a GranadaDigital que esto se debe a que los enseres de Fernández Noguera están bajo custodia judicial y prefieren no hacer declaraciones al respecto de momento.