El artista argentino Fede Comín vuelve a la Tertulia dos años después con un concierto en solitario
El cantautor llega un vez más al escenario del mítico bar granadino este viernes a las 21:30 horas
El bar La Tertulia ha acogido tantos conciertos de Fede Comín en los últimos 20 años que sólo contarlos parece un trabajo imposible. El cantautor argentino ha pisado en tantas ocasiones el escenario del mítico local ubicado en la calle Pintor López Mezquita que incluso le ha dado tiempo a irse y volver, en un lapso de casi dos años, y que aún siga perteneciendo a lo rutinario para quienes frecuentan sus paredes. "Es volver a casa", como cuenta Comín, que en esta ocasión acudirá solo, acompañado únicamente con su acústica, al contrario de lo llevado a cabo en sus últimos conciertos, donde se rodeaba de la percusión de Nano Ramos o la inconfundible melódica de Aire Ortega.
El formato pretende aprovechar de nuevo ese espacio de intimidad propio del lugar, buscar la comunión con el público desde la complicidad próxima de los pocos metros que separan el proscenio de las sillas ubicadas para los asistentes. Un terreno conocido para el artista, que trae bajo el brazo su trayectoria y el cariño desde Valencia, donde experimenta desde el último año en su estudio de grabación, probando algunos temas sin la presión añadida del trabajo contrarreloj tras la publicación de su último disco, 'La Otra mitad del mundo'.
"Estoy buscando, probando otras cosas" explica. Y no le falta razón, el argentino se encuentra ahora mismo en todo tipo de proyectos. Desde componer la música de pequeñas piezas de teatro al trabajo que ya compartía con su faceta de cantautor como artesano del títere, Comín sigue en continuo diálogo con la música. Sus dos últimos temas publicados hace unos días, 'La máquina' y 'Ansiedad generalizada' así lo avalan. "Hace tiempo que dejé a los existencialistas atrás. Lo bonito es volver, ver a los chicos. Lo demás, el viernes será un experimento" cuenta sobre su próximo concierto.
Este contará con un repertorio donde no faltarán los grandes clásicos de su cancionero de Comín, ese que ha marcado la memoria sentimental de tantos que pasaron por La Tertulia y que crecieron al ritmo que nacían, uno tras otro, con temas como 'El hormiguero' o el sempiterno 'Mira como tiemblo' en los primeros 2000, y que vieron la madurez musical del argentino en otros como 'Qué se yo' o 'Circular', tras su época con la BBC y los minicomponentes, esa banda local que llenaba las salas granadinas durante sus escasos tres años de vida a fuerza de buen gusto y rock and roll. El registro, quizás más desconocido para sus seguidores más añejos, sigue imponiéndose entre sus referentes, como se puede ver en sus últimos temas y la influencia evidente de autores como Luis Alberto Spinetta y la escena musical que lo acompañaba, pasada por el filtro de la canción de autor española, y que conviven en toda su discografía.
De hecho, el artista comparte programación este fin de semana con Hilda Lizarazu, que compartiera durante tantos años escenario con la leyenda viva, a pesar de todo, Charly García, el gran referente del rock argentino por antonomasia. "Si hay dos personas que están detrás de esas canciones que amamos, las de Charly, son María Gabriela Epumer y ella, sólo conocerla ya es mucho". Un cartel magnífico, a fin de cuentas, el de la rockera y Comín para este fin de semana, que tendrá en la intimidad de este último un valor añadido para este viernes de mayo, tan dado a la frenética de la primavera, pero que, a buen seguro, acogerá ese tiempo perdido en estos dos años sin poder disfrutar de su música, de su temple escénico, de su estar al fin y al cabo, que después de 20 años de carrera, sigue enamorando a propios y extraños.