La Fiscalía mantiene la petición de pena al acusado de estafar al amigo con un negocio de apuestas 'online'
El juicio ha quedado visto para sentencia tras la sesión celebrada este martes en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Granada
La Fiscalía ha mantenido la petición de pena de dos años de prisión para el hombre acusado en Granada por la presunta comisión de un delito de estafa por aprovecharse de la relación personal que mantenía con un amigo suyo para pedirle que invirtiera dinero en un supuesto negocio de apuestas 'online' de alta rentabilidad, dinero que el procesado no devolvió.
En el juicio, que ha quedado visto para sentencia tras la sesión celebrada este martes en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Granada, el acusado ha asegurado que le devolvió a su amigo una pequeña parte del dinero que este le dio para que realizara las apuestas a través de distintos pagos, que no documentó debido a la confianza que tenía con él, pero que no pudo devolver el resto ya que lo "perdió en el juego".
"Hice pagos de alquiler y de facturas que él tenía, pero no las tengo documentadas por la confianza que tenía", ha comentado el acusado, algo que el amigo, que ha declarado como testigo, ha negado frente al tribunal.
El procesado ha llegado a reconocer que "le cogió miedo" a su amigo, razón por la que "es posible que le dijera excusas a la hora de devolverle el dinero", y ha asegurado que el perjudicado estuvo en su domicilio y "vio cómo hacía las apuestas, e incluso él lo intentó por su cuenta viendo que era relativamente fácil ganar".
"Otros amigos y familiares, unos siete u ocho, me habían dejado dinero para apostar, lo vieron en mi casa, y lo hicieron por su cuenta viendo que era relativamente fácil. Yo me pasaba 17 o 18 horas jugando cada día para conseguir dinero para la gente", ha asegurado el acusado.
La Fiscalía acusa al acusado de un supuesto delito de estafa, al concurrir abuso de las relaciones personales existentes entre la víctima y el defraudador. En la vista se ha señalado que el acusado, con antecedentes penales previos por dos delitos de estafa, alegó a su amigo falta de liquidez para afrontar el negocio de las apuestas por sí solo, y le prometió que gestionaría las apuestas y las ganancias.
Según la Fiscalía, dada la confianza del denunciante en el acusado a causa de la estrecha relación de amistad, "este le hizo entrega de sucesivos pagos hasta llegar a 40.000 euros, realizándose el primero de ellos el 13 de octubre de 2011, confiando en la buena fe del acusado así como en la relación de amistad íntima existente entre ellos".
"El acusado recibió el dinero sabedor de que no acometería lo prometido, toda vez que el presunto negocio de apuestas online no existía, aprovechando su relación personal con el perjudicado para moverle a la entrega dineraria plenamente confiado en la viabilidad de la operación y en la obtención de la fuerte rentabilidad prometida por el procesado", asegura la Fiscalía.
El Ministerio Fiscal asegura que, pasado el tiempo, el denunciante "comenzó a albergar sospechas sobre la operación", ya que no había recibido beneficios y el acusado se negaba a devolverle el capital invertido, alegando este unas "supuestas negociaciones para invertir todo el dinero en un parque de atracciones de Punta Cana (República Dominicana), extremo de nuevo incierto".
En el mes de septiembre de 2012, el acusado, "con el fin ilícito de mantener intacta la confianza del perjudicado", prometió a su amigo pagos periódicos a través de transferencias bancarias hasta completar la cifra de 18.999 euros, "transferencias que nunca se realizaron".
"Desde entonces, todos los esfuerzos del perjudicado para obtener la devolución del dinero entregado al acusado fueron infructuosos, por lo que decidió presentar una denuncia el día 12 de octubre de 2016 contra el acusado", ha asegurado.