Fiscalía pide 25 años de prisión al acusado por el asesinato de la joven de Juncaril

La Fiscalía ha modificado este jueves sus conclusiones en la última sesión del juicio que se ha celebrado esta semana en la Audiencia de Granada contra el hombre acusado de matar el 5 de febrero de 2021 a una mujer de 29 años en el Polígono Juncaril de Albolote y ha solicitado una condena de 25 años de prisión por el delito de asesinato con alevosía y ensañamiento que se le atribuye.

La Fiscalía había pedido inicialmente la libre absolución para el acusado y que fuera internado en un centro psiquiátrico penitenciario por un tiempo máximo de 22 años y medio al entender que padecía esquizofrenia paranoide y que cuando cometió el crimen sufrió un brote psicótico que anuló completamente sus facultades, por lo que a su juicio concurría la eximente completa que recoge en estos casos el Código Penal.

No obstante, tras el desarrollo del juicio la Fiscalía ha modificado sus conclusiones, ha eliminado esta eximente y ha considerado que el acusado cometió este asesinato sin que concurra ninguna circunstancia atenuante de la pena, según han detallado a Europa Press fuentes del caso, que precisan que además del delito de asesinato le acusa de otro de resistencia a agentes de la autoridad por el que solicita otros nueve meses de cárcel y un tercer delito de hurto por el que pide una multa.

Las dos acusaciones particulares --ejercidas por los padres de la joven por una parte y por un hermano por la otra, han elevado a definitivas sus conclusiones y solicitan un total de 30 y 29 años de prisión, mientras que la defensa ha solicitado un máximo de 20 años de internamiento psiquiátrico.

Serán ahora los miembros del jurado popular que enjuicia este caso los que deban decidir si el acusado cometió el crimen en pleno uso de facultades o no, toda vez que ya tienen en su poder el objeto del veredicto y se retirarán ahora a deliberar. En lo que han coincidido todas las acusaciones a lo largo del juicio es en que el presunto asesino acabó con la vida de la mujer, de nombre Ana Elena, con gran "crueldad", causándole un "gratuito e innecesario sufrimiento" a fin de aumentar su agonía, pues le propinó numerosos golpes en la cabeza y el resto del cuerpo que alternó con varias puñaladas.

"Vi en ella el demonio"

El acusado, de 36 años, se declaró culpable en la primera sesión del juicio y manifestó que en aquella época sufría alucinaciones y tenía ideas delirantes vinculadas al diablo y que le hacían creer que él mismo "tenía poderes". En la mañana en que se produjeron los hechos cogió un cuchillo de su vivienda porque creía que se le "iba a aparecer el demonio" y salió a la calle huyendo porque se "sentía perseguido" por él, según dijo ante el tribunal del jurado.

En ese momento comenzaron a darle "ataques de agresividad" y "de pánico" y, según relató, empezó a escuchar voces y sonidos "estridentes" que le llevaron a alejarse de allí y apareció en la empresa de su padre, donde en ese momento la víctima, que trabajaba en labores administrativas, se encontraba sola y el establecimiento aún cerrado al público.

El acusado dijo que no recuerda cómo llegó hasta allí ni la mayor parte de la agresión, pero afirmó en numerosas ocasiones que lo que le ocurrió es que estaba "viendo al demonio" en la joven y "no quería verlo", enmarcando el crimen --que fue grabado por las cámaras de seguridad-- en estas supuestas alucinaciones.