La Fiscalía rebaja a 15 años de prisión su petición para la acusada de matar a su novia en Motril
Entiende que en los hechos no concurre el ensañamiento y que, por tanto, el crimen debe ser calificado de homicidio y no de asesinato
La Fiscalía ha rebajado a 15 años de prisión, frente a los 17 años y medio que solicitaba inicialmente, su petición de pena para la mujer que ha sido juzgada esta semana en la Audiencia de Granada tras confesar en abril de 2021 que había acabado con la vida de su novia en el cortijo en el que vivían en Motril y que luego había intentando sin éxito deshacerse del cadáver.
En la última sesión del juicio, la Fiscalía ha modificado sus conclusiones provisionales por entender que en los hechos no concurre el ensañamiento y que, por tanto, el crimen debe ser calificado de homicidio y no de asesinato, aplicándole la agravante de parentesco y el atenuante de confesión, según han detallado a Europa Press fuentes del caso. Junto a ello, el fiscal ha retirado la acusación por encubrimiento del crimen para el segundo encausado al entender que concurre la eximente completa de alteración psíquica, dado que padece un retraso mental con un grado de discapacidad del 54 por ciento.
La acusación particular, que ejerce la familia de la víctima, de nombre Marina, ha mantenido su petición de que la acusada, de unos 36 años, sea condenada a prisión permanente revisable por un delito de asesinato al entender que sí hubo ensañamiento y atendiendo a la especialmente vulnerabilidad de la víctima dada su juventud -tenía 18 años- y su "frágil" carácter, lo que propiciaba que su pareja la manipulara y mantuviera "aislada socialmente", según se ha expuesto durante el juicio.
Esta acusación ha modificado sus conclusiones provisionales para el segundo acusado por entender que concurre la eximente incompleta de alteración o anomalía psíquica y solicitan que sea condenado a seis meses de prisión.
Durante su declaración la acusada reconoció la autoría del crimen, que se produjo el 13 de abril de 2021 en el comedor de la vivienda a raíz de una discusión. Según relató, había consumido cocaína y ansiolíticos, de modo que cuando la víctima, que estaba fregando las cosas del desayuno, se le acercó con un cuchillo reaccionó de este modo. "No pensé, le quité el cuchillo y la apuñalé (...) no sé dónde le di ni cuántas -puñaladas- fueron", según dijo. Aunque intentó ocultar el cuerpo con la ayuda del segundo acusado, finalmente optó por entregarse a la Policía y confesar al día siguiente.
La defensa de la acusada sostuvo en la primera sesión del juicio que actuó presa de un "arrebato o una obcecación" por el citado consumo de droga y ansiolíticos y reclamó la libre absolución por la aplicación de la eximente completa de trastorno mental transitorio; En caso de condena pide una pena que no supere los diez años prisión. Está previsto que los miembros del jurado reciban el objeto del veredicto este jueves por la mañana y a partir de ese momento se retiren a deliberar sobre este caso.