La Fiscalía rebaja a 17 años y medio su petición para el hombre que degolló a su mujer en Caniles
El Ministerio Público ha modificado así sus conclusiones provisionales y ha contemplado la circunstancia atenuante de confesión
La Fiscalía ha rebajado de 25 a 17 años y medio de prisión su petición para el hombre que ha sido juzgado esta semana en la Audiencia Provincial de Granada acusado de degollar con un cuchillo de cocina a su esposa el 22 de enero de 2020 en la vivienda en la que ambos residían en Caniles, hechos que el acusado confesó tras ser detenido por la Guardia Civil y de los que se declaró culpable en la primera sesión del juicio.
El Ministerio Público ha modificado así sus conclusiones provisionales y ha contemplado la circunstancia atenuante de confesión, rebajando hasta los 17 años y seis meses de cárcel su petición para el acusado, de 79 años, por un delito de asesinato, según se ha puesto de manifiesto durante la última sesión del juicio, que ha tenido lugar este jueves, y tras lo que se ha entregado el objeto del veredicto al jurado popular encargado de enjuiciar este caso.
La acusación particular, que ejerce el hijo que la fallecida tenía de una relación anterior y que reclamaba inicialmente 22 años de prisión por asesinato, se ha adherido al escrito del fiscal y también la defensa. Aunque esta última solicitó en un primer momento la libre absolución para su cliente por aplicación de la eximente completa que recoge en estos casos el Código Penal por alteración psicológica, ha modificado sus conclusiones después de que los forenses hayan declarado durante el juicio que el acusado no padecía en el momento de los hechos ninguna enfermedad mental y que, por tanto, era consciente de lo que estaba haciendo.
En la primera sesión del juicio, el acusado se declaró culpable de los hechos que se le imputan --haber golpeado en la cabeza a su mujer con un palo de madera y luego degollarla con un cuchillo de cocina-- pero dijo que no recordaba nada de la agresión. "Lo que pasó, no lo sé; no recuerdo nada", aseguró al ser preguntado por el crimen. De hecho, declaró que no recordaba que existieran discusiones previas que motivaran su actitud o que sufriera algún tipo de problema psicológico cuando decidió matar a su esposa, María Concepción, de 74 años.
Según el escrito de conclusiones provisionales del fiscal, consultado por Europa Press, el matrimonio residió en la provincia de Barcelona hasta el momento en que el acusado, oriundo de Caniles, se jubiló; comenzando entonces a pasar temporadas en una vivienda de este municipio, que fue donde ocurrieron los hechos.
En los últimos meses la convivencia del matrimonio, que llevaban juntos casi 50 años, "se había deteriorado" hasta el punto de que la víctima había expresado a su marido su deseo de poner fin a la relación. El acusado, "incapaz de soportar que su esposa decidiera terminar la relación de manera libre y unilateral, tomó la firme decisión de acabar con su vida".
Así, sobre las 11:00 horas del 22 de enero de 2020 el acusado se dirigió a la cocina, donde estaba la víctima, "provisto de un palo de madera de 81 centímetros de longitud y la golpeó en la cabeza", dejándola semiinconsciente y sin posibilidad alguna de defenderse.
"Seguidamente cogió un cuchillo de cocina y la degolló realizando varios cortes en el cuello, uno de derecha a izquierda y varios de izquierda a derecha, muriendo María Concepción de manera inmediata". De acuerdo al informe forense, la mujer presentaba a causa de la agresión cuatro heridas en el cráneo; y en el cuello, dos heridas por degüello.