Fundación Caja Rural Granada colabora con el proyecto Atención a la Infancia Hospitalizada de Cruz Roja
Su principal objetivo es apoyar a pacientes de entre 3 y 17 años y a sus familias durante su ingreso hospitalario
El presidente de Caja Rural Granada y de su Fundación, Antonio León y el delegado especial de Cruz Roja Granada, Gabino García, han firmado un acuerdo para colaborar con el proyecto Infancia Hospitalizada de la organización solidaria cuyo principal objetivo es apoyar a niños y jóvenes de entre 3 y 17 años y a sus familias durante su ingreso hospitalario.
Durante la reunión, Antonio León ha mostrado su satisfacción por apoyar este programa que cubre aspectos de gran relevancia para las familias que pasan por un momento muy complejo como es la hospitalización de un niño.
"Sabemos del buen hacer de Cruz Roja a través de su voluntariado. Son muchos años de colaboración con esta organización de referencia motivo por el cual hemos decidido dar un paso más y contribuir en este proyecto que busca mejorar la calidad de vida de estos niños y de sus familias", ha destacado.
Fundación Caja Rural Granada ha querido, además, tener un detalle con los pequeños que participan en estas actividades a los que entregará una mochila con un estuche con lápices y juegos de mesa.
En Granada, cerca de 50 jóvenes voluntarios participan semanalmente en este proyecto, poniendo color a esta situación tan gris a la que se enfrentan los más pequeños de la casa", ha afirmado por su parte Gabino García, quien ha añadido que, el pasado año, 342 niños fueron atendidos en Granada desde este proyecto.
"Las madres y los padres nos cuentan cómo sus hijos llegan a olvidarse de que se encuentran en un hospital cuando están con el voluntariado de Cruz Roja".
Los desajustes de un diagnóstico
El diagnóstico de una enfermedad en niños y jóvenes conlleva una serie de desajustes sociales, emocionales y educativos, tanto para ellos como para sus familias. El ingreso hospitalario supone un proceso de adaptación a un medio extraño, donde se ha de interactuar en un espacio ajeno, con normas, horarios y rutinas diferentes.
Esta situación abre una etapa caracterizada por la incertidumbre. Para reducir los efectos y garantizar un correcto desarrollo, Cruz Roja realiza una labor fundamental a través de su voluntariado.
Se trata del citado proyecto, Atención a la Infancia Hospitalizada, que contempla actividades lúdico-educativas, con sesiones dirigidas a dinamizar y fomentar acciones como animación, dramatización, psicomotricidad; manualidades y expresión artística; actividades musicales o juego.
El apoyo escolar es otra faceta crucial del proyecto, que cuenta desde la animación a la lectura hasta el apoyo en diversas asignaturas y el uso de nuevas tecnologías. Este enfoque garantiza que los niños y niñas no vean interrumpido su proceso educativo durante su estancia en el hospital.
Por otra parte, para apoyar a las familias, los voluntarios también realizan sesiones de acompañamiento cuando no puedan estar presentes. Para los pequeños que no puedan acudir al espacio donde se desarrollan las actividades, el proyecto contempla el acompañamiento en la habitación donde se encuentran ingresados.