Los gimnasios granadinos salen a la calle para protestar por un cierre que consideran "injusto"
Critican que otras actividades, como la venta de tabaco y bebidas alcohólicas, sí que estén permitidas
En las últimas modificaciones que ha hecho la Junta de Andalucía con respecto al BOJA de 8 de noviembre de 2020 por el que se regulan los niveles de alerta 3 y 4 como consecuencia de la situación crítica epidemiológica derivada del Covid-19 en nuestra comunidad, a los expertos que conforman el gabinete sanitario de la Administración autonómica 'se les olvidó' incluir a los gimnasios y centros deportivos en el listado de 'actividades esenciales'.
Un 'descuido' que obliga a estos centros a permanecer cerrados durante los próximos días, a pesar de que estas instalaciones sirven para mejorar la salud de las personas.
Eso es lo que han querido denunciar un centenar de personas que se han concentrado este sábado por la tarde en la Plaza del Carmen, enfrente del Ayuntamiento de Granada, para reclamar a la Junta de Andalucía que revise la orden del 8 de noviembre y que les permita abrir, tal y como ha hecho con otras actividades.
Los afectados, más de 200.000 personas, según indican en las pancartas que portaban los manifestantes, hacen hincapié en que el deporte "no es el problema" del aumento de los contagios vividos en el último mes en la provincia de Granada, sino que más bien "forma parte de la solución".
En este sentido, critican que otras actividades, como la venta de tabaco y bebidas alcohólicas, sí que estén permitidas, mientras que el deporte y el cuidado de la salud se restrinja solamente a poder realizarlo al aire libre y para profesionales federados.
"Hacer actividad física controlada por monitores ayuda a recuperar lesiones, a mejorar la salud cardio-respiratoria e, incluso, fortalece el sistema inmunitario, con lo que podría ayudar a prevenir contagios por Covid-19", explican los manifestantes, que consideran "demasiado injusto" que les hayan vuelto a dejar sin poder realizar su actividad.
Los centros deportivos defienden, así, ser espacios biosanitarios seguros que han cumplido "de manera exhaustiva" con todas las recomendaciones e imposiciones que en relación con la seguridad, higiene y desinfección de sus centros se han venido adoptando por las autoridades sanitarias competentes -entrenamiento individual, asegurando la distancia entre personas, desinfectando las instalaciones y el material después de cada uso y sin que se llegue a compartir, estableciendo sistemas restrictivos de acceso y movilidad en las instalaciones, con aforos por debajo de los legalmente establecidos-.
A la concentración no solo han acudido propietarios y trabajadores de los centros deportivos, sino también algunos usuarios que también han querido sumarse a esta protesta.