Gonalons, de menos a Max
Las prestaciones del centrocampista galo del Granada CF mejoran con el paso de las jornadas y su peso en el equipo aumenta paulatinamente
Maxime Gonalons fue el último en incorporarse a la disciplina rojiblanca en la ventana estival. Aunque se encontraba en la Ciudad Deportiva desde por la mañana del día de cierre de mercado, su cesión procedente la Roma no se hizo efectiva hasta minutos antes de la doce de la noche, hora del carpetazo final a dos meses de idas y venidas futbolísticas.
Debutó contra el FC Barcelona, disputando siete minutos que sirvieron para abrochar el triunfo; fue titular unos días más tarde en Valladolid y tuvo que remplazar a Montoro a los cinco minutos en el Bernabéu. A partir de ahí, lo ha jugado prácticamente todo, salvo la visita de la Real Sociedad, en la que fue baja de última hora por un virus estomacal. Sumada a la de Montoro, la baja del francés apagó la luz creativa del centro del campo rojiblanco esa noche.
Por primera vez en lo que va de temporada, el pasado sábado Diego Martínez decidió alinear juntos al valenciano y al de Vénissieux, siempre escoltados por Azeez en esa particular demarcación de pivote por delante de los volantes. Cierto es también que la no convocatoria final de Yangel Herrera ayudó mucho a la conjunción de dicha pareja de baile. Montoro y Gonalons mezclaron bien y, a pesar de la intensidad que aglutina el Atleti en la zona ancha, consiguieron generar fútbol y repeler las embestidas ‘colchoneras’ cuando tocó. Como el equipo, empezaron algo espesos y desbordados, pero poco a poco supieron ir acoplándose el uno al otro en función de las características del choque.
Preguntado por el francés después del choque, Diego Martínez afirmó que, aunque no le gusta individualizar en su análisis, Gonalons fue de menos a más en el partido, así como lo lleva haciendo desde que se enfundó la rojiblanca horizontal. Además, su implicación con el grupo va en aumento, como se pudo ver al celebrar con rabia el tanto de Germán, que a la postre sirvió para empatar el envite.
La calidad del ex del Olympique de Lyon, Roma y Sevilla es indiscutible y su adaptación ha ido avanzando progresivamente. No obstante, hasta ahora, el papel de Max había sido el de sustituir a Montoro, tarea complicada teniendo en cuenta que no tienen el mismo perfil. Sin embargo, el regreso del jefe de la sala de máquinas granadinista tras su lesión ha abierto una nueva opción para Diego Martínez, que podría optar por una medular con aleación franco-española.