Atracan a punta de navaja a dos mujeres en el Camino Bajo de Huétor abriéndoles las puertas del coche
Los asaltantes, dos encapuchados, colocaron sus armas blancas a la altura de la yugular de las víctimas, ambas de mediana edad, hiriendo leve a una de ellas
Perplejidad y sensación de inseguridad. Los vecinos del Camino Bajo de Huétor presenciaron en la medianoche de este sábado una escena poco habitual en esta zona residencial de Granada. Dos hombres, al menos uno de ellos de mediana edad, encapuchados y armados con navajas bloquearon la salida de un vehículo que estaba estacionado en esta importante vía del Zaidín, le abrieron las dos puertas delanteras y colocando sendas armas blancas a la altura de la yugular de sus ocupantes, otras dos mujeres también de mediana edad, terminaron consiguiendo que éstas les entregaran sus carteras con tarjetas de crédito y otros documentos personales, así como sus teléfonos móviles. Una de ellas resultó herida leve en el cuello y la mano derecha debido al roce de la hoja de la navaja.
Los hechos sucedieron pasada la medianoche del sábado al domingo en el sector del Camino Bajo de Huétor que conecta las calles Sancho Panza y Alcalá de Henares, junto al Instituto de Astrofísica de Andalucía. Se trata de una zona tranquila en la que los bloques de viviendas se entremezclan con grandes y, en algunos casos, suntuosos chalés. Las víctimas, residentes en un pueblo de fuera del Cinturón, ya han presentado la correspondiente denuncia ante la Policía Nacional. El susto, eso sí, no se lo quita nadie. El shock y el trauma durante unos días, probablemente tampoco.
Tal y como han relatado a GranadaDigital testigos presenciales en el momento de los hechos, los dos encapuchados habrían 'fichado' a las mujeres metros antes de entrar en el coche. Una vez lo hicieron, y ya con el vehículo arrancado, ambos abrieron las puertas delanteras, le colocaron las armas blancas en el cuello y, atropelladamente, les exigieron que les dieran todo lo que tenían. Las abordaron tan rápido y de manera tan sorpresiva que el bloqueo de puertas automático del automóvil, un SUV, no llegó a activarse, lo que permite hacerse una idea de que los atracadores habían elegido premeditadamente a las víctimas. Incluso las mujeres tardaron unos segundos en entender lo que estaba pasando.
A la carrera
Una vez obtuvieron el botín, los asaltantes huyeron a la carrera. La víctima de más edad salió corriendo detrás de los cacos calle arriba pero no pudo alcanzarlos. Un vecino que se los encontró de frente trató también de estorbarles con el cuerpo para cortarles el paso, momento en el que uno de ellos volvió a sacar su arma blanca para advertirle de que no hiciera "tonterías". Otros residentes y transeúntes que paseaban o circulaban en sus coches por el lugar cuando sucedieron los hechos asistieron a las dos mujeres hasta que llegó la Policía.
Según la descripción facilitada a los agentes, los delincuentes vestían sudaderas con capucha azul celeste y tendrían un acento que permitiría identificarles como de nacionalidad española.