Una semana buscando a Lorenzo Román
El granadino continúa desaparecido mientras sus familiares y amigos despliegan un dispositivo voluntario que rastrea su posible paradero
Lorenzo Román de Leyva salió de una consulta médica, en el entorno de los Jardines del Triunfo, en la mañana del pasado martes, 13 de septiembre. Había quedado con su pareja poco después, pero no se presentó en el lugar acordado. Desde entonces, hace ya una semana, nadie ha vuelto a saber de él. Continúa la búsqueda del granadino, de 38 años, que sigue movilizando a decenas de familiares y amigos, además de profesionales de la Policía Nacional, Policía Local y los Bomberos.
"Están abriendo otras líneas de investigación, pero siempre partimos desde el mismo punto, de la última vez que se vio a mi hermano", detalla a GranadaDigital Lucía Román nada más reunirse con las fuerzas de seguridad implicadas en el dispositivo de búsqueda. "Van a revisar otras zonas más complicadas, pero nos aconsejan que sigamos centrándonos en revisar los espacios en un radio de unos 500 metros desde el punto en el que desapareció. Este domingo pusimos el puesto de mando en San Miguel Alto. Nos trasladan que sigamos por ese camino e ir extendiendo la búsqueda por Granada, el Albayzín y los pueblos de la periferia", abunda. Son estas las pautas que marcan un rastreo que comenzó hace siete días y que ha propiciado hasta el momento dos batidas voluntarias y una concentración para pedir colaboración ciudadana.
La investigación ha sido asumida por la Policía Nacional y, hasta el momento, el dispositivo profesional de búsqueda abarca distintas zonas de la capital granadina. "No hay novedades, desgraciadamente, y seguimos trabajando en las mismas líneas. Nosotros, pidiendo la colaboración ciudadana sin querer poner a nadie en riesgo. Revisamos senderos, campos…", señala Lucía Román, quien también puntualiza que los cuerpos de seguridad abarcan franjas "de montaña o más peligrosas". "De la reunión, sobre todo, ha salido que siguen trabajando y su intención de colaborar con la familia", resume.
Sospecha de que está en movimiento
El rastreo que promueven sus familiares y amigos, incide, "no es ir paseando hasta encontrarle por la calle". "Tiene que ser una búsqueda minuciosa. Sin ponerse nadie en riesgo, pero mi hermano no va a estar andando por un camino normal. Hay que meterse por senderos, veredas… Recorridos más alejados de la gente", matiza. En este sentido, aclara que Lorenzo "sufre ataques de pánico que se han producido por un pico de ansiedad e insomnio", y, dado que acostumbra a hacer senderismo al ser scout, "podría estar moviéndose". "Se podrían dar los casos de que esté escondido y huyendo, y está acostumbrado a andar", insiste.
"Queremos resaltar que no es en absoluto peligroso. Está asustado. No es una persona agresiva de por sí, pero en este estado, que es lo que nos dicen que puede estar ocurriendo, tampoco lo es. Necesita atención médica urgente", expone su hermana. Esta circunstancia es la que extrema la emergencia en su hallazgo. El último paradero en el que se conoce que estuvo es el entorno del alto Albayzín, cerca del restaurante Casa Torcuato. Es allí donde lo situó la geolocalización de su teléfono móvil después de salir de la consulta. Lleva consigo el terminal, pero dejó de estar encendido al llegar a ese punto.
La búsqueda voluntaria del granadino ha cubierto hasta el momento una superficie "muy amplia". "Vamos a volver a empezar, con el conocimiento que hemos adquirido en estas cosas y las instrucciones que nos están dando sobre cómo hay que mirar, porque, claro, no somos expertos", se encoge Lucía Román. "Volvemos a mirar desde el principio de una manera más minuciosa. Sabemos cómo estaba mi hermano el día que desapareció, cómo vestía, y seguimos partiendo de esa información, pero a día de hoy no sabemos cómo va ni cómo está. La gente tiene que estar muy atenta", precisa. En el último momento en el que se tuvo conocimiento de su paradero, vestía camisa blanca y beige, un pantalón corto azul y zapatillas deportivas, de la marca Nike y el modelo ‘Air Jordan’, en color rojo y negro. Mide 1,70 metros, tiene complexión atlética, barba, pelo negro y calvicie parcial.
La indicación que transmite la familia a los ciudadanos que crean haber visto a Lorenzo es que, de inmediato, lo notifiquen al Servicio de Emergencias 112. "Que tengan su cara presente y, si lo vieran en cualquier momento, llamen. Es lo más efectivo", afirma Lucía Román. Entretanto, continúan promoviendo la búsqueda voluntaria. "Hemos creado unas redes propias en Twitter e Instagram, que son @busquedalorenzo, y estamos dándole la máxima difusión posible. Estamos pensando cómo organizamos las nuevas batidas multitudinarias, teniendo en cuenta que es lunes y la gente empieza a trabajar. A lo mejor, pasamos a convocar por la tarde.. Eso no quiere decir que sus familiares y amigos, la red que hemos formado, no sigamos buscando".