Más de 10 horas donde el cansancio no puede a la ilusión

Con cansancio, pero con la maleta cargada de ilusión. Así ha llegado la afición del Granada desplazada a Vitoria, los 387 granadinistas que partían esta mañana de viernes con las gargantas cargadas para animar a su equipo en este encuentro vital para los suyos que abre la jornada 39. Han sido largas horas de autocar, pero que todos y cada uno de ellos esperan que merezcan la pena si, como desean, se vuelven con una victoria en el equipaje de vuelta a Granada.

En uno de esos autocares fletados por el club se ha desplazado Rosi junto a tres de sus amigos. A su llegada a tierras vascas, aproximadamente a las tres de la tarde, reconoce el cansancio del viaje favorecido por las dos paradas realizadas como también que han aprovechado para coger fuerzas para alentar a los suyos cuando el reloj marque las 21:00 horas en Mendizorroza. "Con muchas ganas de que sea ya esta noche para animar al Granada", confiesa Rosi a GranadaDigital.

Ella ha sido los ojos y la voz de todos los que en esta jornada de viernes han hecho la maleta para estar con su equipo en uno de los momentos más importantes de la temporada. El cansancio de esas más de diez horas de autobús ya quedó atrás y con el paso de las horas y según se va aproximando el arranque del partido son las ganas y la ilusión de lo que puede lograrse las que vencen ese largo tiempo de desplazamiento.

Por eso, a estas horas, la afición granadinista en Vitoria ya calienta motores y pone sus gargantas a punto para la ocasión. Todo para que su equipo se sienta arropado a domicilio, donde aún lo necesita más si cabe especialmente otra vez en las últimas fechas, y tener un regreso a casa feliz.