La paciencia rojiblanca, a prueba frente al rival que inició sus males

La resistencia hasta ahora expresada por el Granada en Los Cármenes pasa una prueba de madurez este sábado (16:15 horas). El Andorra, un equipo jugón empujado por el entusiasmo, a siete puntos del playoff, examina la paciencia del conjunto rojiblanco, acostumbrado a llevar la voz cantante en su feudo, aun con algunas dudas en ciertos choques, sin que nadie haya sido capaz aún de rebelarse. El técnico nazarí, Paco López, avanzó este jueves en su rueda de prensa tramos de dominio visitante, en los que sus pupilos tendrán que demostrar que saben desenvolverse para imponer su autoridad en este contexto. De no hacerlo, pueden empezar a saltar las alarmas.

El Andorra ya tiene tomadas las medidas del cuadro nazarí. De hecho, como diría su propietario, con el conjunto pirenaico empezó todo. Los males lejos de Granada, el humedecimiento de la pólvora en cada viaje, los aletargados arranques y las faltas de atención. Entonces, pese al juego del que vienen haciendo gala los de Eder Sarabia, fue un balón a la espalda en el inicio del choque lo que desequilibró el marcador y la falta de acierto del equipo granadino, dirigido por Karanka en aquellas fechas, lo que evitó la igualada. Se desesperaron los rojiblancos.

Los andorranos tratarán de forzar de nuevo ese nerviosismo presumiblemente con un fútbol pausado, muy posicional. Es la fórmula que les ha llevado a una acomodada décima posición, tan lejos del descenso como de la promoción, a pesar de llegar a Los Cármenes inmersos en una dinámica errática. Dos derrotas consecutivas y solo un triunfo en los últimos ocho duelos, incluida una eliminación copera, mina al conjunto pirenaico, cuyo técnico no se podrá sentar en el banquillo, expulsado en la pasada jornada. El equipo ya trabajó en Granada, sin los lesionados Martí Vilà y Adrià Vilanova, además del sancionado Álex Pastor. Sarabia sí podrá contar, en cambio, con sus goleadores, Sinan Bakis y Carlos Martínez.

El conjunto rojiblanco recupera a su artillero, Myrto Uzuni, aunque Paco López dejó en el aire su titularidad. De igual modo, regresa Meseguer, una vez superada su lesión, para ganar alternativas en una medular en la que, no obstante, vuelve a perder a Bodiger, de nuevo sancionado tras cubrir el cupo de amarillas frente al Ibiza. Se antoja un encuentro en el que el rival no ataque en exceso la espada, sino que busque el desajuste con combinaciones en espacios interiores, por lo que cabe esperar que el técnico vuelva a formar con cuatro hombres atrás y refuerce el centro del campo. Las dudas brotan en los laterales. En el derecho, el preparador rojiblanco avivó el debate entre Quini y Ricard por pura decisión técnica; en el izquierdo, las molestias de Carlos Neva en la última sesión de entrenamiento abren la puerta a una permuta. La titularidad de Miguel Rubio e Ignasi Miquel parece algo más clara.

Víctor Díaz vuelve a emerger como recurso para tratar de obstaculizar en espacios interiores el fútbol de toque por el que Sarabia muestra predilección. El capitán trabajó como pivote en la sesión abierta a prensa, demasiado temprana como para ser concluyente, pero el arreglo gana enteros para ser de la partida, con Meseguer recién recuperado y Sergio Ruiz todavía falto de ritmo competitivo. Petrovic y Melendo, a priori, le acompañarían en la sala de máquinas. De ir el encuentro por los derroteros previstos, requerirá velocidad en los costados, lo que otorga a Bryan Zaragoza, agitador habitual, la oportunidad de pugnar por un puesto en la banda. El canterano pide minutos a base de grandes actuaciones y resulta difícil argumentar su suplencia. Sin embargo, el el entrenador rojiblanco quiso disolver esta idea, lo que sitúa a Puertas como candidato más sólido a situarse en la orilla diestra, aparentemente inamovible Callejón en la contraria.

Arriba, todo está más abierto. Famara Diédhiou, recién aterrizado, requiere todavía una puesta a punto, mientras que Jorge Molina parece no gozar de la confianza de Paco López, a pesar de ofrecer una opción natural. Con Uzuni de vuelta, el técnico puede volver a alinear a su goleador casero, aunque ya ha confiado en Puertas para ejercer de falsa referencia. El albanés es, de todos, el único que parece tener la mirilla bien ajustada, aunque solo sea en su barrio.

El triunfo empieza a ser una obligación para el Granada, al menos en su estadio, para seguir alimentando sus opciones de ascender. Comienza la jornada fuera de la franja de la promoción, algo lejos la vía rápida hacia Primera, y puede terminar cuatro puntos por debajo si no gana. La competición acelera y el tren del ascenso no espera. El Andorra tiene la oportunidad de creer, conocidas ya las costuras del conjunto rojiblanco. Habrá que ver quién tiene un mayor grado de resiliencia.

Alineaciones probables:

Granada CF: Raúl Fernández; Ricard, Miguel Rubio, Ignasi Miquel, Jonathan Silva; Víctor Díaz, Melendo, Petrovic; Puertas, Callejón y Uzuni.

FC Andorra: Raúl Lizoain; Altamira, Diego Alende, Mika Mármol, Pampín; Marc Aguado, Hevel, Sergio Molina; Germán Valera, Albanis y Baki.

Árbitro: Adrián Cordero Vega, del comité cántabro.