El Granada besa la lona en el primer asalto (0-2)

El Atlético golpea primero en un saque de esquina que se le atraganta a Sandra y puso un pie en la final con un golazo de Gio ante más de 7.200 personas en Los Cármenes

Granada CF Femenino Atletico de Madrid Femenino
Silvia Lloris celebra el primer gol del Atlético ante la decepción de Laura Pérez | Foto: Antonio L. Juárez
Chema Ruiz España
0

El Granada Femenino besa la lona en el primer asalto. El Atlético de Madrid golpeó primero, en un saque de esquina que se le atragantó a Sandra, y por segunda vez gracias a Gio Queiroz, que inventó una acción maravillosa que culminó en la escuadra. Lo suficiente para tumbar al conjunto rojiblanco horizontal, movido por el entusiasmo y el coraje, pero sin filo para obtener recompensa en alguno de sus compases de dominio. A las colchoneras, conformistas, les bastaron un par de ráfagas y oficio en la protección para dejar encaminada la eliminatoria. Pudieron sentenciarla, pero la guardameta granadina se hizo enorme para detener un penalti ya en el tiempo extra y enmendar su error anterior. La cosa se queda viva para la vuelta, aunque las madrileñas ponen un pie en la final ante más de 7.200 personas en Los Cármenes.

Todo empezó con el más solemne de los silencios, abrupto tras el himno, como premonitorio. El estadio enmudeció en lo que el club, desbordado por la respuesta de la hinchada, decidía abrir los fondos para albergar a los aficionados que al inicio todavía bordeaban la instalación. Las colchoneras se situaban en sus marcas y las de franjas horizontales, como ajenas al encuentro, se congregaron junto al banquillo. Irrumpió la voz de la capitana de repente: “¡Un, dos, tres, Granada!”, rompieron el mutismo. Alexia aceleró de inmediato, hasta arriba el depósito de motivación sin plomo. Forzó el córner en la primera arrancada para provocar la corazonada nazarí. Las de casa la sintieron y salieron con el colmillo retorcido, sin complejo ni nada que perder.

La bravura granadinista, sin embargo, fue encerrada de forma súbita. No porque el Atlético, que se fue extendiendo hacia adelante como un murmullo apenas perceptible, sacara a relucir la carcasa de equipo grande, sino porque el infortunio se cebó con Sandra en el primer zarpazo colchonero. Otermín le puso helio a la pelota desde la esquina, muy cerrado el lanzamiento, y la guardameta quiso palmear. El escorzo resultó defectuoso y el cuero rebotó en la cabeza de Silvia Lloris antes de cruzar la línea de gol. Agua helada para aplacar la rebeldía del Granada. 

Al equipo de Víctor Marín pareció saciarle, sin demasiada ambición para intentar hacer más sangre. Las rojiblancas horizontales se fueron recomponiendo poco a poco, con tímidas olas que perdían el pulso en la orilla. Laura Pérez rociaba el balón con polvo de hadas cada vez que pasaba por sus botas, espectáculo para el respetable, y Leles pegó con más violencia que atino en una falta. En estas, Gio inició la carrera a la espalda, indetectable tras otro fallo de Sandra, aunque la portera se rehizo en el mano a mano. Fue aislado; el Granada despertaba espoleado por la afición. Lauri prolongó para la carrera una vez más de la portadora del ‘7’, que tensó el arco de las asistencias. Apareció Alexia, que en un gesto poco ortodoxo clavó el balón en la misma esquina donde el poste se junta con el travesaño. Suspiraron las atléticas. 

Arturo Ruiz cargaba el juego por donde Laura Pérez destilaba magia. Otermín soñará varias noches con la granadina, a quien Montse Tomé, que estaba en la grada, sigue dejando en leído. Sorteó de nuevo a un par de rivales como si fueran picas en el entrenamiento y descargó para el impacto alto de Alexia. Después fue Andrea Gómez quien trató de aprovechar un regalo, desviado por una zaguera antes de llegar a las manos de Lola Gallardo. Postigo, más tarde, soltó el latigazo también arriba, antes de que Boe Risa voleara sin atino al final del primer acto. Al Atlético, contra las cuerdas, el pitido le sonó a música celestial; el Granada, por contra, desfiló con el ceño fruncido. En el graderío, un grito unánime: “¡Sí se puede!”.

Las nazaríes regresaron con el cuchillo entre los dientes, afilado por los costados, pero el Atlético estuvo cerca de encontrar el segundo en un saque de esquina embarullado. Otermín buscó la etiqueta olímpica y el esférico hizo vibrar el palo. Gio y Jensen acudieron al rebote, pero recibieron sendos tapones. Fue el último aviso, justo cuando Edna salía a calentar entre aplausos. Laura Pérez seguía sacando la cadena de cuantas colchoneras se le pusieran por delante, pero sin aliadas en el área que engrosaran su historial de pases de gol. Sí encontró Leles una testa amiga en una falta que Jujuba la hizo aterrizar con potencia, felina Lola Gallardo cuando la grada ya rugía.

Después Gio frotó la lámpara. Recogió el balón cerca de la divisoria y abrió la válvula del óxido nitroso. Hizo derrapar a Andrea Gómez y esquivó a Jujuba a una velocidad endiablada, antes de apretar el gatillo. Directo a la escuadra, inalcanzable para la estirada de Sandra. Un golazo que hizo añicos la ilusión de las granadinistas. No se acobardaron, aun así. Tiraron de orgullo y dieron un paso al frente hasta maniatar al Atlético, que empezó a jugar con el cronómetro con picardía para desesperación de las de franjas horizontales, pero Lola Gallardo vivía tranquila. La tensión fue en aumento, auspiciada en cada roce que terminaba con una colchonera estirada sobre el césped, y la cosa se fue al alargue con las visitantes en su trinchera.

Las rojiblancas ya cruzaban su mirada con la grada como lo hicieron Ryan Gosling y Emma Stone al final de La La Land, imaginando lo que podía haber sido de su cita, cuando Jujuba cayó en un sueño profundo que Luany aprovechó para colarse hasta la cocina. La brasileña derribó a la atacante, penalti claro. Lauren Leal, que llevaba poco en el campo, se puso la capucha de verdugo, pero ante sí se estiró Sandra como si en algún momento hubiera adquirido las habilidades de Ms. Marvel. Detuvo la pena máxima y el rechace, encomiable respuesta tras un encuentro gris para, al menos, perfundir esperanza para la vuelta.


Ficha técnica:

Granada CF: Sandra; Postigo, Alba Pérez, Jujuba, Alexia Fernández; Ari Mingueza, Leles (Miku, 74’); Laura Pérez, Lauri (Paula Arana, 74’), Ornella; y Andrea Gómez (Edna, 63’).

Atlético de Madrid: Lola Gallardo; Moraza, Xénia Pérez, Silvia Lloris; Boe Risa (Lauren Leal, 63’), Gaby García; Luany, Tatiana Pinto, Rosa Otermín; Synne Jensen (Fiamma, 63’) y Gio Queiroz (Marta Cardona, 77’).

Goles: 0-1: Silvia Lloris, min. 14; 0-1: Gio Queiroz, min. 61.

Árbitra: María Eugenia Gil Soriano, del comité gallego. Amonestó a las locales Lauri y Postigo, así como a las visitantes Silvia Lloris, Gaby y Luany.

Incidencias: encuentro correspondiente a la ida de las semifinales de la Copa de la Reina, disputado en el estadio Nuevo Los Cármenes, ante 7.216 espectadores. Antes del partido, un jugador y una jugadora de la cantera del club saltaron al césped con una camiseta de la campaña 8M. Jugadores de la cantera del Granada ondearon banderas durante el himno. 







Se el primero en comentar

Deja un comentario