El Granada Femenino da rienda suelta a la ilusión
El conjunto dirigido por Arturo Ruiz se marcha al parón liguero con 19 puntos e inmerso en una racha histórica en Primera División
Lo del Granada Femenino es una cosa muy seria y son pocos los argumentos que pueden negar que es el equipo revelación de la Liga F. Marcha sexto y se va al parón con 19 puntazos tras ganar por la mínima este sábado al Madrid CF, su tercer triunfo consecutivo. Nunca había logrado enlazar tres victorias, ni tampoco había conseguido tal cosecha antes de la 24ª jornada de Liga, como recogió la cuenta especializada en estadísticas rojiblancas Ighalopedia (@GCFstats). En esta ocasión, lo ha hecho tras 13 fechas, margen suficiente para, de la mano de Arturo Ruiz, asentar un fútbol alegre, incisivo y eficaz que sorprende a la máxima categoría. El descenso le queda a 13 puntos, el doble de la distancia que le separa en este momento de cotas europeas. Datos que alimentan el entusiasmo, le acercan una salvación menos sufrida y decretan el estado de euforia.
El momentum granadinista se apoya en una serie de factores que han desplegado las alas del conjunto rojiblanco. Todo parte de un planteamiento que desde el inicio de curso desprendió buenas sensaciones, aunque los resultados tardaron en acompañar. Arturo Ruiz implementó a su llegada una serie de conceptos futbolísticos que las nazaríes fueron automatizando con el paso de las jornadas, aunque ya en los dos primeros encuentros dejaron ver algunos cimientos de lo que en el vestuario del Granada se estaba construyendo. Fue tras dos derrotas consecutivas, ante Barcelona y Real Sociedad, cuando todo tomó una forma más definida. El equipo empezó a practicar un juego fluido y de eminente vocación ofensiva con base en una presión muy alta con la que exigir protagonismo con la pelota.
De ahí, los números que avalan el fútbol rojiblanco, más allá de los propios resultados. Remató tantas veces como el Atlético de Madrid -10 disparos- en su primera derrota y duplicó los tiros del Athletic en su segundo encuentro perdido -16 en total-, en el que además acaparó el 58% de la posesión. Sí se vio sometido por el Barça y, en menor medida, por la Real Sociedad, aunque frente al Betis y el Espanyol volvió a dominar las estadísticas. En sus triunfos, las nazaríes siempre han gobernado tanto con la pelota como en ataques. Enlaza ocho jornadas con un mayor porcentaje de balón que sus adversarios, cuatro de ellas sin perder.
Jugadoras en estado de gracia
Estos guarismos emanan del estado de gracia de las futbolistas rojiblancas, con la flechita para arriba en todas las líneas. Laura Sánchez suplió con nota la ausencia bajo palos de Sandra Estévez, que ha regresado a un nivel alto. Por delante, Arturo Ruiz ha construido una muralla en la que ha rotado piezas sin que el rendimiento haya caído. Jujuba lideró hasta su lesión, con Postigo e Isa Álvarez en alternancia como sus compañeras. En los costados, Alba Pérez ha dado un paso al frente -lleva ya casi tantas titularidades como en todo el curso pasado- y Alexia Fernández ha encajado como si llevara toda la vida corriendo por la banda de la Ciudad Deportiva. La carrilera cedida por el Atlético de Madrid ya lleva dos goles y una asistencia que adornan su contribución.
En la medular hay más permutas, pero siempre bajo la dirección de Ari Mingueza. La internacional sub-23 ha tomado esta temporada la batuta y a su ritmo coordina la armonía rojiblanca. Como bisagra, el despliegue físico de Lauri, incansable aunque en lo numérico no esté luciendo tanto. Aun con todo, lleva tres goles y una asistencia.
Pero lo que está marcando las diferencias en el equipo revelación es la sociedad que cuestiona la supremacía culé en las clasificaciones individuales. Laura Pérez y Edna Imade continúan rompiendo la categoría, en la cima de asistentes la granadina y segunda mejor goleadora la delantera. Arturo Ruiz ha exprimido su mejor versión y las ha convertido en protagonistas de su juego. La extremo, que suma nueve pases de gol, ya lleva años siedo importante en el equipo y lo fue el curso pasado, con cinco tantos y cuatro asistencias, pero es en este ejercicio cuando ha logrado ser determinante. La ariete, en cambio, ha recibido la confianza del técnico para pasar de ser refresco -solo fue titular en 10 partidos el curso pasado- a faro ofensivo del Granada. Lleva nueve muescas, a una de Ewa Pajor.
La conjunción de todo ello ha producido un plantel irreverente, que no se achanta en los duelos con independencia del rival o el estadio y que, de momento, mantiene a la Liga F con la boca abierta. Si sigue así, hará historia. Ahora mira a la Copa de la Reina, competición que le plantea otra motivación, con brillo en la mirada. La ‘Arturoneta’ ha despegado y, si las fiestas no pasan factura, amenaza con hacer disfrutar mucho a la hinchada rojiblanca.
Se el primero en comentar