Un test de Primera antes de viajar a Montecastillo

El Granada afronta este jueves un test de Primera justo antes de viajar a Montecastillo. El conjunto rojiblanco se enfrenta a Las Palmas en el Marbella Football Center (19:00 horas) para seguir ganando rodaje, ya con Rubén Sánchez, su tercer fichaje, integrado en la dinámica grupal. El catalán podrá disputar sus primeros minutos con el cuadro que dirige Guille Abascal, que espera concretar en las próximas horas su cuarta incorporación, cerca el georgiano Tsitaishvili. Del campo, la expedición nazarí partirá directamente hacia Jerez para desarrollar su stage veraniego, punto en el que la preparación estival aumenta las revoluciones.

Será el primer examen al equipo de Abascal ante un rival de la categoría que acaba de abandonar, después de empatar ante el Orlando Pirates y perder frente al Almería. Dos citas en las que el conjunto rojiblanco arrojó más sombras que luces, si bien es pronto para sacar el bisturí y ahondar en análisis. Hasta el momento, los nazaríes apenas han hecho más que sumar carga e intentar ir asimilando los conceptos que el técnico sevillano pretende implementar. La idea parece clara: fútbol pausado, construcción elaborada y protagonismo con balón, aunque ello suponga asumir riesgos.

Ahí reside la principal dificultad que entraña el juego que Abascal desea que su equipo desarrolle, aún lejos de automatizar los mecanismos. Lo sufrió en ambos encuentros, especialmente gafado Luca Zidane en el último, ante los ojos de su padre en la grada. El mítico futbolista francés presenció la primera derrota nazarí, en un choque ante un rival directo que también sacó a relucir las carencias que todavía tiene la plantilla del Granada, en construcción. No pudo competir Ricard, con molestias, así que el entrenador rojiblanco hubo de reubicar a Oscar Naasei. Ahora cuenta con Rubén Sánchez, que llega rodado tras iniciar la preparación con el Espanyol.

Los hombres de la medular todavía tendrán que doblar esfuerzos, sin más piezas que Hongla, Sergio Ruiz y Gonzalo Villar. El murciano se va erigiendo en director de orquesta rojiblanco, motivado y con galones en lo que va de pretemporada. Algo así como lo que parece suceder con Weissman, afilado, único goleador del Granada hasta ahora. Quiere un sitio y Guille Abascal le da la oportunidad de ganárselo en la rotación veraniega. También los canteranos que en estas semanas se codean con los mayores. Algunos, como Rodelas, se saben a caballo entre el filial y el primer equipo; otros, como Brau y Pablo Sáenz, todavía tratan de decantar la balanza. Habrá tiempo para todos este jueves.

Las Palmas se presenta con el mismo bagaje veraniego que el Granada, aunque con un plantel más renovado. Los de Luis Miguel Carrión se van construyendo al tiempo que insertan nuevas piezas en el puzle, algunas cotizadas tras despuntar en Segunda, como Manu Fuster o Viti Rozada. Está llamado a forzar más la maquinaria rojiblanca de lo que hicieron sus adversarios anteriores, si bien queda para que cualquiera de los dos contendientes pueda ofrecer un ritmo realmente competitivo. Las pachangas, no obstante, se van poniendo serias, y a ninguno le convendría extender demasiado la racha sin resultados. Al menos, no si quieren evitar el ruido.