El Granada presenta su versión gris (1-1)

El conjunto rojiblanco dejó buenas sensaciones en el primer tiempo, pero los cambios al descanso lo congestionaron

Granada CF Malaga CF
Puertas sortea a un rival durante el encuentro | Foto: Antonio L. Juárez
Chema Ruiz España
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El Granada ha presentado su versión gris. El conjunto rojiblanco, en el último compromiso de la pretemporada, convenció durante un primer acto en el que jugó con fluidez y agobió a su rival, pero se congestionó tras el descanso y ha acabado perdiendo en los penaltis. El cuadro dirigido por Aitor Karanka cerró el tiempo reglamentario con un ceniciento empate a uno, pero el Málaga, su rival de presentación, se llevó el Trofeo Ciudad de Granada en una torpe tanda de penaltis. Puertas, fiel a su cita con el gol un año más, abrió el marcador; Álex Gallar igualó la contienda. La orquesta granadinista todavía tiene que afinar sus instrumentos, pero se vislumbran notas interesantes y un planteamiento de juego definido. La próxima cita, en Ibiza, no será tan indulgente ante tramos de aletargamiento.

El preparador rojiblanco permitió que los hinchas, con una mano en la frente para luchar contra el sol en algunas zonas del estadio, empezaran a familiarizarse con algunos de los rostros que defenderán su escudo este curso. Karanka situó a Raúl Fernández bajo palos en lo que pudo ser un esbozo del once que salte en Ibiza, ya sí a competir por los primeros puntos. Ricard Sánchez se apostó en el pasillo diestro, con Quini de vuelta al izquierdo y los dos laterales zurdos aptos para jugar en el banco. Miguel Rubio e Ignasi Miquel se clavaron en el centro de la zaga, escoltados por el tándem Petrovic-Bodiger, que ya carbura en la medular y apunta a ser el titular en el inicio liguero. Callejón aguardó su momento en la caseta; Puertas se quedó la banda derecha y Uzuni, la opuesta. Con Melendo recién aterrizado, fue Soro quien ejerció de bisagra, cerquita de un Matías Arezo famélico

El atacante uruguayo está decidido a hacer de esta su temporada y exterioriza su ansia por encandilar a la grada. Pudo haber quien, al comprobar sus ademanes, pensara por momentos estar viendo al exnazarí Luis Suárez. Fue él quien se encargó de acelerar los primeros compases de un encuentro pausado, cuyo guion colocó a los nazaríes en un rol protagonista. El nuevo Granada quiere tener la pelota y aprovechar cada centímetro de terreno de juego con laterales muy abiertos, que penetran como puñales. Avanzó posiciones Quini, entre un par de imprecisiones de Petrovic y Bodiger, y colgó un centro que no halló rematador. Después, fue Arezo quien se descolgó para aprovechar el espacio generado en banda y habilitar a Uzuni, que controló mal en el área. Se asomó Javi Jiménez para empalmar arriba, pero el conjunto dirigido por Pablo Guede estaba apagado o fuera de cobertura.

Se coló Ricard Sánchez hasta la línea de fondo y centró, pero a Arezo solo le alcanzó para acariciar la pelota con el flequillo. Uzuni, sin compañía en el segundo poste, perdió de nuevo la ocasión. Fran Sol se hizo con un balón muerto en el balcón del área y disparó con violencia, atento Raúl Fernández. El delantero uruguayo del Granada le emuló inmediatamente después, con poca puntería.

El charrúa se empezaba a llevar el duelo al terreno de lo personal, más insistente que ‘Coyote’ en su afán por cazar al ‘Correcaminos’ en la popular serie animada. Robó Uzuni, en una presión bien coordinada del cuadro rojiblanco, y filtró para la carrera de Arezo. El uruguayo encontró poco menos que una alfombra hasta la portería y un margen demasiado amplio para imaginar el gol. Reina intuyó sus intenciones y le puso un tapón que repelió el disparo. En el saque, Anduvo pillo Ricard Sánchez, que vio descolocado al guardameta malaguista y probó suerte desde la misma esquina, pero corrigió a tiempo el cancerbero.

Los de Karanka se sentían cómodos. Apenas sufrían y no necesitaban exigirse demasiado para ocasionar problemas, a pesar de que el partido, aún de pretemporada, carecía de ritmo. Se giró bien Petrovic cerca de la esquina para entregar un balón complicado a Soro. El mediapunta resistió la embestida de Genaro y tiró a la cepa del poste. Juanfran, más adelante, aprovechó un despiste de Uzuni para combar un envío al segundo palo, donde a Rubén Castro le debió de cegar el sol. El serbio, que también quiere ser protagonista en este curso, se animó después a lanzar un libre directo lejano, con un impacto seco, pero Reina palmeó el latigazo.

La pausa para la hidratación amenazaba con matar lo que quedaba de primer tiempo, pero Arezo convirtió un saque de banda anodino, en campo propio, en una clara ocasión de gol. El uruguayo se ofreció para recibirlo y, aun cayéndose, consiguió lanzar un poco ortodoxo envío a la espalda de Uzuni. Juande no tardó en darse cuenta de que la velocidad del albanés era mucho mayor e intentó cerrarle el camino, pero el extremo rojiblanco le levantó las pegatinas en dos zancadas. Templó los nervios una vez se hizo con el balón y aguantó para descargar sobre la incorporación de Puertas, que, ya en las inmediaciones de Reina, lo levantó con delicadeza para llevarse los cánticos del estadio. Pasan los años y sigue goleando como rojiblanco. 

Los cambios atolondraron a los de Karanka a la vuelta de los vestuarios. Se estrenó Callejón en Los Cármenes, recibido con una ovación y ubicado en la media punta, pero fue Uzuni el que provocó el ‘¡uy!’ de la grada, al cabecear un envío de Puertas después de que el almeriense tirara un sombrero a Javi Jiménez. Antes, Rubén Castro permitió a André Ferreira saludar a su hinchada con una estética, pero sencilla, parada, aun con la acción invalidada por fuera de juego. Aparecieron errores con mayor frecuencia y los de Pablo Guede dieron un pasito adelante, sin malicia. Puertas, un verso suelto en la tendencia del duelo, trató de hacerlo virar. Recogió el balón y comenzó a zigzaguear por el perfil del área; provocó un cortocircuito en el sistema locomotor de Genaro y golpeó con la izquierda, desviado por poco.

Pero la rebeldía del almeriense no generó suficiente potencia para volver a arrancar el motor. Entraron Víctor Díaz, Jorge Molina y Rochina, pretorianos de la vieja guardia en este remozado plantel, y fue precisamente una pérdida del valenciano, que se complicó en campo propio, lo que propició el empate. La pelota cayó al recién incorporado Álex Gallar, en una posición franca, y este cumplió en la ejecución.

El empate apagó el pulso del duelo. Bodiger intentó marcar desde su propio campo y Jorge Molina falló después en un remate junto al poste. El fútbol se fue antes de tiempo a casa y el cruce terminó en los penaltis, que proclamaron vencedor al Málaga tras más fallos que aciertos. El Granada cierra la pretemporada con piezas aún por acoplar, tal vez falto de ensayo con sus nuevos efectivos, pero con un viso que ilusiona a la hinchada. Progresa adecuadamente, aunque el margen para probaturas terminó este sábado y todavía queda temario por asimilar. La próxima cita, en Ibiza, ya sí cuenta para la evaluación final.

Ficha técnica:

Granada CF: Raúl Fernández (André Ferreira, 45’); Ricard Sánchez (Jonathan Silva, 45’), Miguel Rubio (Miki Bosch, 45’), Ignasi Miquel, Quini; Petrovic, Bodiger; Antonio Puertas, Soro (Callejón, 45’), Myrto Uzuni; y Arezo.

Málaga CF: Manolo Reina; Bustinza, Genaro, Juande (Moussa Diarra, 79'); Juanfran, Ramón (Álex Gallar, 56’), Jozabed, Febas (Haitam, 88'), Javi Jiménez; Fran Sol y Rubén Castro.

Goles: 1-0: Puertas, min. 38; 1-1: Álex Gallar, min. 69. 

Penaltis: 1-0: Bryan Zaragoza; 1-1: Rubén Castro; 1-1: falla Rochina; 1-2: Fran Sol; 2-2: Petrovic; 2-2: falla Javi Jiménez; 2-2: falla Ignasi Miquel; 2-2: falla Haitam; 2-2: falla Callejón; 2-3: Marca Jozabed.

Árbitro: Alejandro Quintero González. Amonestó a los visitantes Febas y Jozabed, así como al local Bodiger.

Incidencias: Encuentro correspondiente al Trofeo Ciudad de Granada, disputado en el Nuevo Los Cármenes, ante 8.269 espectadores. Antes del encuentro, se guardó un minuto de silencio en memoria de los abonados fallecidos, el padre de la presidenta del Granada, Sophia Yang, y la madre del director general de la entidad nazarí, Alfredo García Amado. En el descanso del partido, el club rojiblanco entregó, por medio de Pepe Macanás, un obsequio al exgranadinista Nico Hidalgo.