La primera prueba, con el equipo a medio hacer
El Granada de Aitor Karanka se estrena en pretemporada ante el Córdoba, con solo dos fichajes y varios canteranos para complementar a la plantilla
El Granada de Aitor Karanka se adentra en la fase crucial de su pretemporada con el equipo a medio hacer. El conjunto rojiblanco se estrena este miércoles (20:30 horas) en la preparación estival, ante un Córdoba recién ascendido a Primera RFEF y que dirige el granadino Germán Crespo. Este encuentro debía ser una primera prueba para calibrar la plantilla tras el descenso de categoría, pero la ausencia de incorporaciones complica que el choque permita ver con claridad la idea de juego que el preparador nazarí pretende plasmar sobre el terreno, así como los ajustes que ha realizado con respecto al cierre del pasado curso. El cuadro granadinista se presentará en El Arcángel con solo dos fichajes y la intención de sumar carga en las piernas de sus futbolistas, pero con poco margen para extraer conclusiones.
Recluido en la Ciudad Deportiva, el Granada acumula algo más de dos semanas de trabajo en las que el técnico, además de evaluar a varios canteranos para complementar a la plantilla, aguarda nuevas llegadas. Hasta el momento, el conjunto rojiblanco solo ha incorporado a Yann Bodiger y Raúl Fernández, mientras el vestuario ha sido desprovisto de sus piezas más importantes. Presumiblemente, ambos dispondrán de minutos ante el conjunto blanquiverde, como también Ricard Sánchez, que se une al cuadro rojiblanco tras jugar cedido el curso pasado en el Lugo. Junto a él, regresaron Adrián Marín, que opta a quedarse finalmente, y Antoñín, cuyo futuro inmediato apunta lejos de Los Cármenes.
Miguel Ángel Brau, Mario González, Adri Bosch, Mario Da Costa y Bryan Zaragoza son los jugadores de campo del Recreativo Granada que vienen trabajando a las órdenes de Aitor Karanka, junto a los porteros Rafa Romero y Alberto Martínez, si bien los dos primeros son duda por sufrir molestias. Otros como Théresin y Martín Solar han aparecido eventualmente por los ensayos rojiblancos. En Córdoba, tendrán la oportunidad de ganar puntos y convencer al técnico vitoriano, que también examina en estas semanas al central Philip Osei, igualmente entre algodones. Varios de ellos también se vestirán de corto en El Arcángel, donde Carlos Neva y Torrente, lesionados de larga duración, estarán ausentes. Tampoco está previsto que aparezca Víctor Díaz, Rochina y Milla, aquejados de distintas dolencias. La presencia de Isma Ruiz abre alguna duda más.
Vaticinar una alineación será complejo. Lo normal es que jueguen prácticamente todos los futbolistas disponibles. El compromiso permitirá comprobar si Karanka apuesta por un sistema con dos pivotes y un mediapunta, por el que mostró predilección en su primer mes en Granada, o la revolución en el conjunto rojiblanco también llega a la pizarra. En el centro de la zaga, donde los recursos son mínimos, Pepe podrá demostrar que está preparado para tomar el mando en la línea, flanqueado por unos laterales donde se esperan pruebas -Quini podría volver a jugar en el carril zurdo-. Petrovic y Bodiger comenzarán a conocerse en la medular, por detrás de un enganche que podría ser Butzke -frecuentó esta posición en el filial- o Mario Da Costa durante el duelo. Previsiblemente, alternarán.
La cantidad de efectivos con los que cuenta Karanka para actuar en los costados no le otorga demasiado margen de maniobra. Uzuni, Antonio Puertas y Soro son los hombres disponibles para actuar en banda, a quienes se puede unir Bryan Zaragoza. El albanés y el almeriense están llamados a ser determinantes, en especial el ex del Ferencvaros. Tras la marcha de Machís, el club rojiblanco espera que él aporte el desequilibrio y canalice el peso ofensivo del equipo. En cuanto a marcar los goles, las esperanzas se las reparten Jorge Molina y Matías Arezo. El alcoyano parte como la principal referencia en ataque de los nazaríes. Lo confirmó el propio preparador granadinista, que espera que sea el artillero del vestuario. Del uruguayo espera que dé el salto de nivel que se le presupone que puede llegar a dar. Esta pretemporada es clave en su adaptación, tras un cierre de la pasada campaña complejo. Ahora, ya al ritmo de sus compañeros, debe comenzar a rendir.
El Córdoba lleva menos tiempo trabajando que el Granada, al frente de un Germán Crespo ilusionado. El granadino se enfrenta al club de su vida y disfrutará el choque, que sí le permitirá evaluar a una plantilla que se parece más al grupo con el que empezará la campaña. El club cordobesista es ambicioso, por lo que cabe esperar que se exija en el duelo. Para ambos, no obstante, será el primer test de pretemporada, por lo que el resultado pasa a un plano secundario. Ir adquiriendo el ritmo de competición, engrasando la maquinaria tras unas semanas de vacaciones se propone como el principal objeto del encuentro. Para el aficionado, será un bocado veraniego a poco menos de un mes del inicio del curso. A los dos les quedará trabajo tras lo de hoy.